Mentoring: cómo diseñar un plan integral dentro de una compañía

Quizás has escuchado del coaching, un concepto bastante conocido. Sin embargo, en esta ocasión te contaremos sobre el mentoring.

En resumen, es una herramienta clave para desarrollar el talento dentro de las empresas, fortaleciendo las habilidades y conocimientos de los empleados a través de una relación estructurada entre mentores y aprendices.

Según Association of Talent Development, mejora el compromiso y la retención de los colaboradores, impulsando el crecimiento organizacional.

¿Qué es el mentoring y para qué sirve?

Es un proceso de aprendizaje en el que un mentor, generalmente con mayor experiencia, guía a un aprendiz para potenciar su desarrollo profesional y personal.

De acuerdo con Forbes, este enfoque permite transferir conocimientos y mejorar habilidades, fomentando el éxito tanto individual como organizacional.

¿Qué diferencia hay entre mentoring y coaching?

Aunque ambos conceptos están relacionados, tienen enfoques distintos:

• Mentoring: se centra en el desarrollo a largo plazo, donde el mentor comparte experiencia y consejos.
• Coaching: es más puntual y busca mejorar competencias específicas a través de técnicas estructuradas.

Según Deloitte, el mentoring es más de relaciones y enfocado a resultados concretos en un plazo definido.

¿Cuál es el enfoque?

El mentoring se enfoca en:

1. Transferencia de conocimientos: compartir experiencias valiosas.
2. Desarrollo de habilidades blandas: como liderazgo y comunicación.
3. Orientación profesional: ayudar en la planificación de carrera y toma de decisiones.
4. Fortalecimiento de relaciones: crear vínculos de confianza entre mentores y aprendices.

¿Cuáles son los tipos de mentoring?

De acuerdo con Guider AI, algunos tipos son:

1. Mentoring tradicional: relación uno a uno entre mentor y aprendiz.
2. Mentoring inverso: los jóvenes empleados asesoran a sus superiores en áreas como tecnología.
3. Mentoring grupal: un mentor guía a varios aprendices al mismo tiempo.
4. Mentoring cruzado: se realiza entre empleados de diferentes áreas o empresas.

Estos modelos permiten a las empresas adaptarse a las necesidades de sus colaboradores.

¿Cómo diseñar un plan integral de mentoring?

Para implementar un plan integral de este tipo, es importante:

1. Definir objetivos claros: establecer metas específicas como mejorar el desempeño o preparar líderes.
2. Seleccionar a los mentores: identificar perfiles con experiencia y habilidades de comunicación.
3. Crear un programa estructurado: establecer tiempos, recursos y mecanismos de evaluación.
4. Capacitar a los participantes: garantizar que tanto mentores como aprendices comprendan sus roles.
5. Medir resultados: evaluar el impacto en términos de desarrollo profesional y satisfacción laboral.

Beneficios de un plan integral

Según la Universidad de Southampton, un programa bien diseñado puede:

• Aumentar la retención de talento.
• Mejorar la productividad.
• Fomentar una cultura organizacional colaborativa.
• Reducir costos asociados con la rotación de personal.
• Facilitar la transferencia de conocimiento y experiencia.

Como ves, es una estrategia poderosa para impulsar el talento humano dentro de una empresa.

Diseñar un plan integral no solo mejora el desarrollo individual, sino que también fortalece la competitividad organizacional.Un enfoque estructurado y bien ejecutado de Mentoring puede marcar la diferencia entre una empresa promedio y una sobresaliente.