Cómo la inflación afecta la percepción del salario y qué pueden hacer las empresas al respecto

La inflación es conocida, e incluso temida, porque suele incrementar el precio de los productos y servicios. Sin embargo, también impacta directamente en la percepción que tienen los trabajadores sobre su salario.
Y es que, a medida que el poder adquisitivo disminuye, los empleados sienten que ganan menos, aunque su sueldo nominal no haya cambiado.
Esto representa un reto urgente para las empresas que buscan mantener motivado y satisfecho a su talento humano. Es por eso que te compartimos qué puedes hacer en este caso.
¿Qué es la inflación?
De acuerdo con el Banco de México (Banxico), la inflación es el aumento generalizado y sostenido de los precios de bienes y servicios en un país durante un periodo de tiempo determinado.
Es decir, cuando se da este fenómeno, el dinero pierde valor y se necesita más para comprar lo mismo que antes.
¿En cuánto se ubica la inflación en México?
Según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) con corte a marzo de 2025, la inflación general anual en México se ubicó en 3.80 por ciento, impulsada principalmente por los aumentos en alimentos, servicios de transporte y vivienda.
Aunque ha bajado respecto a picos anteriores, sigue por encima de la meta de Banxico del 3 por ciento.

¿Qué tiene que ver la inflación con el salario?
La relación entre inflación y salario es directa: si los precios suben y los ingresos se mantienen iguales, el trabajador pierde poder adquisitivo.
Según el estudio “Panorama Laboral 2024” de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), este desfase permeó en dicho año.
Lo anterior puede provocar insatisfacción, rotación de personal y menor productividad en las empresas.
¿Es obligatorio el aumento del sueldo por inflación en México?
La Ley Federal del Trabajo (LFT) no establece una obligación directa para que los empleadores ajusten el salario de sus trabajadores con base en la inflación, salvo para el salario mínimo, el cual es revisado cada año por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CONASAMI).
Para el resto de los trabajadores, el ajuste depende de la política interna de cada empresa y de los acuerdos en cada contrato.
Lo que deben tomar en cuenta las empresas
Para las organizaciones, ignorar el efecto de la inflación en el bienestar financiero de los empleados puede tener consecuencias graves: desde una mayor rotación hasta la pérdida de talento clave.
En este contexto, el Informe Tendencias en Beneficios para Empleados y Empleadas 2024 señala que únicamente el 36.2 por ciento de los colaboradores reporta que sus empresas han realizado acciones para compensar por la inflación.
Entre eso destacan subidas de sueldo moderadas, incremento en beneficios, bonos, y otros.
Por otra parte, el 63.76 por ciento indica que no ha tenido ningún tipo de apoyo ante el aumento inflacionario.
Ante esto, te recomendamos:
- Revisar los sueldos al menos una vez al año considerando el índice inflacionario.
- Ofrecer beneficios flexibles como vales, seguros o días libres para compensar.
- Establecer bonos o pagos extraordinarios en momentos de inflación alta.
- Comunicar con claridad las decisiones financieras para mantener la confianza del equipo.
La inflación es una realidad que las empresas no pueden ignorar si quieren mantener su competitividad y cuidar a su capital humano. Aunque no siempre se traduzca en aumentos salariales automáticos, es fundamental adaptar las políticas de compensación a un entorno económico en constante cambio.