Qué es el Sistema de administración tributaria (SAT)

¿Alguna vez te has preguntado cómo se administra la recaudación de impuestos en México? El Sistema de Administración Tributaria (SAT) es el órgano encargado de gestionar y dar seguimiento a los impuestos cobrados tanto a personas físicas como a morales, es decir, a personas comunes y a empresas. 

Antes de entrar de lleno a conocer todo lo referente al SAT, vale la pena regresar en el tiempo para entender los antecedentes históricos de los impuestos en México. 

Tabla de contenidos

• La histórica necesidad de un organismo especializado en impuestos
• El SAT como lo conocemos 
• Los diferentes tipos de trámites que el SAT ofrece
  • Persona física
  • Persona moral

La histórica necesidad de un organismo especializado en impuestos

Desde la época colonial, México ha establecido diversos organismos para recaudar impuestos. Sin embargo, fue hasta finales del siglo XX que se sentaron las bases para tener una institución especializada en el tema. 

Quizá el SAT sea relativamente nuevo para los ojos del contribuyente mexicano, pero esto no quiere decir que antes de su fundación, no se cobrarán impuestos en el país. De hecho, se sabe que los pueblos prehispánicos tenían un sistema de tributos que funcionaban como una especie de impuestos para la época. 

Decíamos entonces que si no existía el SAT, entonces ¿quién era el encargado de cobrar los impuestos en México? Esta misión era llevada a cabo por La Secretaría de Hacienda y Crédito Público. 

El SAT como lo conocemos

El 15 de diciembre de 1995 se publicó en el Diario Oficial de la Federación la Ley del Servicio de Administración Tributaria, ordenamiento mediante el cual se creó el órgano administrativo desconcentrado denominado Servicio de Administración Tributaria.

El 1o. de julio de 1997, inició sus funciones el Servicio de Administración Tributaria y su Reglamento Interior se publicó en el Diario Oficial de la Federación el 30 de junio de ese mismo año. 

Ya lo mencionamos, pero debemos reiterar su misión: El Servicio de Administración Tributaria (SAT) es el organismo encargado de recaudar los impuestos en México. 

Tiene como objetivo garantizar la correcta aplicación de las leyes fiscales y facilitar el cumplimiento voluntario de las obligaciones tributarias. Para ello, el SAT cuenta con diversos mecanismos de fiscalización, así como programas para simplificar y agilizar los trámites tributarios.

Los diferentes tipos de trámites que el SAT ofrece

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ofrece una variedad de servicios a los contribuyentes. Entre estos servicios, el SAT proporciona asesoría tributaria gratuita, preparación y presentación de declaraciones juradas, tramitación de reembolsos y créditos tributarios, así como notificaciones y alertas sobre cambios en la legislación tributaria tanto para personas físicas como morales. 

Persona física

Es un individuo que realiza cualquier actividad económica (vendedor, comerciante, empleado, profesionista, etc.), el cual tiene derechos y obligaciones.

Los regímenes para las Personas Físicas se clasifican de acuerdo con sus actividades e ingresos y son:

• Régimen Simplificado de Confianza
• Sueldos y salarios e ingresos asimilados a salarios
• Régimen de Actividades Empresariales y Profesionales
• Régimen de Incorporación Fiscal
• Enajenación de bienes
• Régimen de Actividades Empresariales con ingresos a través de Plataformas Tecnológicas
• Régimen de Arrendamiento
• Intereses
• Obtención de premios
• Dividendos
• Demás ingresos

Persona moral

Es el conjunto de personas físicas, que se unen para la realización de un fin colectivo, son entes creados por el derecho, no tienen una realidad material o corporal (no se pueden tocar como tal como en el caso de una persona física), sin embargo, la ley les otorga capacidad jurídica para tener derechos y obligaciones.

Qué regulaciones tienen los contribuyentes

Los contribuyentes, ya sean personas físicas o morales,  son obligados a cumplir con ciertas regulaciones establecidas por el SAT, como presentar declaraciones y pagar impuestos a tiempo. 

El incumplimiento de estas regulaciones puede resultar en multas y otros penalizaciones.