¿Qué es el ISN? Cómo se calcula el impuesto sobre la nómina en México
¿Qué es el Impuesto sobre la Nómina (ISN)? Probablemente te sorprendas al leer este término, pues no es tan común.
En resumen, se trata de una contribución local que las empresas deben pagar por el simple hecho de tener empleados.
Este impuesto es una de las principales fuentes de ingresos para los gobiernos estatales, y su recaudación está destinada a financiar diversos servicios públicos y proyectos de infraestructura.
Como toda contribución tributaria, la falta de cumplimiento en el pago puede conllevar sanciones significativas. Por esto, es importante que los empresarios comprendan no solo qué es el ISN, sino también cuándo están obligados a pagarlo y cómo se calcula correctamente.
Tabla de contenidos
¿Qué es el ISN?
El Impuesto Sobre Nóminas (ISN) es un impuesto que grava los pagos que las empresas realizan a sus empleados por concepto de salarios, sueldos, y otras prestaciones laborales.
Este impuesto es de carácter local, lo que significa que cada estado de la República Mexicana es responsable de su administración y recaudación.
De acuerdo con el Instituto para el Desarrollo Técnico de las Haciendas Públicas (Indetec), el ISN se aplica sobre la nómina bruta de la empresa.
Cada estado establece su propia tasa, que generalmente oscila entre el 2 y el 3 por ciento del total de los pagos hechos a los trabajadores.
A continuación, te compartimos el porcentaje por entidad:
- Aguascalientes: 2.5 por ciento
- Baja California: 4.25 por ciento
- Baja California Sur: 4 por ciento
- Campeche: 2 a 3 por ciento
- Coahuila: 3 por ciento
- Colima: 2 por ciento
- Chiapas: 2 por ciento
- Chihuahua: 3 por ciento
- CDMX: 3 por ciento
- Durango: 3 por ciento
- Guerrero: 2 por ciento
- Guanajuato: 3 por ciento
- Hidalgo: 3 por ciento
- Jalisco: 3 por ciento
- Edomex: 3 por ciento
- Michoacán: 3 por ciento
- Morelos: 2 por ciento
- Nayarit: 3 por ciento
- Nuevo León: 3 por ciento
- Oaxaca: 3 por ciento
- Puebla: 3 por ciento
- Querétaro: 3 por ciento
- Quintana Roo: 4 por ciento
- San Luis Potosí: 3 por ciento
- Sinaloa: 2.4 al 3 por ciento
- Sonora: 1.5 por ciento en las actividades agrícolas principalmente y 3 por ciento las demás
- Tabasco: 2.5 por ciento
- Tamaulipas: 3 por ciento
- Tlaxcala: 3 por ciento
- Veracruz: 3 por ciento
- Yucatán: 3 por ciento
- Zacatecas: 3 por ciento
El ISN se encuentra regulado por las leyes fiscales de cada entidad federativa, y aunque su cálculo y pago son responsabilidad directa del empleador, este impuesto no puede ser deducido del salario de los trabajadores.
Es decir, el monto del ISN debe ser absorbido por la empresa, sin afectar el sueldo neto de sus empleados.
¿Cuándo estoy obligado a pagar ISN?
Las empresas y empleadores están obligados a pagar el ISN cuando tienen trabajadores a su cargo y les pagan sueldos, salarios, o cualquier otra remuneración económica.
Este impuesto el ISN se debe cumplir en todos aquellos casos en que se realicen depósitos por concepto de nómina, sin importar el tamaño de la empresa o el número de empleados.
Incluso los pequeños negocios y microempresas deben garantizar esta obligación fiscal.
El pago debe realizarse mensualmente, y cada estado establece los plazos específicos para la presentación de la declaración y el pago del impuesto.
Por lo general, las empresas están obligadas a presentar una declaración mensual en la que se detallen los montos pagados a los empleados durante el mes anterior y se calcule el impuesto correspondiente.
Es importante que las empresas se mantengan al día con estas obligaciones para evitar multas, recargos y otras sanciones.
¿Cómo se calcula el ISN en México?
El cálculo del ISN varía ligeramente dependiendo del estado en el que se encuentre la empresa, pero en términos generales, el proceso es similar en toda la República.
Se debe tomar la nómina bruta mensual, que incluye todos los pagos hechos a los empleados, como sueldos, salarios, bonos, y cualquier otra compensación económica.
A esta cifra, se le aplica la tasa correspondiente al estado donde opera la empresa.
Algunos estados ofrecen ciertas exenciones o reducciones en la tasa del impuesto para fomentar la creación de empleos o apoyar a las pequeñas y medianas empresas.
Estas exenciones suelen estar condicionadas a la realización de trámites específicos o al cumplimiento de ciertos requisitos, por lo que es recomendable que las empresas consulten con un asesor fiscal para maximizar los beneficios disponibles y evitar errores en el cálculo del ISN.