Fichar en el trabajo
Fichar en el trabajo significa llevar a cabo un control y registro diario de la hora de entrada y salida de la empresa por parte de los empleados y empleadas.
Desde 2019, fichar en el trabajo, es decir, llevar a cabo ese control horario laboral es obligatorio para todas las organizaciones. El objetivo: proteger a los y las profesionales frente a todos aquellos abusos laborales que redundan en un aumento de la jornada laboral por encima del umbral permitido y, en muchos casos, sin retribución asociada.
Claves de fichar en el trabajo
Fichar en el trabajo era una práctica habitual en ciertas empresas o sectores económicos. Por ejemplo, en la industria, donde los trabajadores y trabajadoras están acostumbrados a registrar la hora de entrada y salida a través de medios electrónicos, especialmente en aquellos centros de producción donde se trabaja en turnos rotativos.
Sin embargo, en otras áreas de actividad, como el sector servicios y especialmente la hostelería, no existe tradición de fichar en el trabajo, dando lugar a jornadas maratonianas que exceden los límites legales y que a menudo no son debidamente retribuidas, una realidad que deja a muchos trabajadores y trabajadoras en una posición de desamparo al respecto.
Con la normativa sobre control laboral y registro de horarios, que recoge el Real Decreto-ley 8/2019, de 8 de marzo, de medidas urgentes de protección social y de lucha contra la precariedad laboral en la jornada de trabajo, la práctica de fichar en el trabajo se torna indispensable para cualquier tipo de empresa. Los objetivos:
Garantizar el cumplimiento de las horas de trabajo consignadas en cada contrato laboral o convenio colectivo, así como el cumplimiento de los límites normativos al respecto.
Aumentar el control sobre las horas extras y la remuneración de las mismas de manera efectiva.
Ofrecer herramientas fiables de lucha contra el fraude y disminuir las tasas de absentismo laboral.
Fomentar la transparencia y la equidad en las condiciones laborales a las que están sujetos trabajadores y trabajadoras.
Así, fichar en el trabajo es ahora mismo una práctica normalizada por parte de todos los empleados y empleadas, independientemente de su modalidad contractual o de la dimensión de la empresa.
Los registros horarios fruto de fichar en el trabajo deben ser documentados y conservados, además, por la organización durante cuatro años.
En ese intervalo de tiempo estarán a disposición de las personas trabajadoras, de sus representantes legales y de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. Porque aquellas entidades que no habiliten métodos para fichar en el trabajo e incumplan con los requisitos del control obligatorio de horas podrán ser sancionadas con multas cuya cuantía dependerá del tipo de infracción.
Fichar en el trabajo pretende mejorar la calidad del mercado laboral, por esa razón, es una práctica extensible a cualquier modalidad de empleo, también la teletrabajo, para lo cual toda empresa ha de habilitar herramientas telemáticas que posibiliten el registro de horas a distancia.
Actualmente, se puede fichar en el trabajo a través de documentos en formato papel accesibles para toda la plantilla y donde se plasma la firma de cada trabajador o trabajadora junto a la hora de entrada y de salida, mediante lectores electrónicos o digitales que se activan en las zonas de acceso, o a través softwares o aplicaciones en la nube, siendo estas últimas modalidades las más inequívocas y sencillas de usar, verificar y gestionar.