Organigrama funcional
Un organigrama funcional es un tipo de organigrama que muestra la estructura organizacional de la empresa en base a las funciones que desempeñan los empleados y empleadas. Este responde a una jerarquía corporativa vertical y es habitual en los procesos organizativos para una mejora continua y en el desarrollo de proyectos multidisciplinares.
El organigrama funcional representa de forma esquemática y muy visual las funciones de departamentos completos o áreas especializadas, diferenciando a sus líderes, así como las tareas y responsabilidades que corresponde a cada equipo de trabajo.
El organigrama funcional permite una gestión más eficiente del trabajo al clarificar las funciones de cada sección y los roles dentro de estas.
Claves del organigrama funcional
Los organigramas funcionales permiten identificar la dependencia de unos departamentos sobre otros, facilitando la comprensión de los roles y la comunicación y coordinación vertical entre departamentos.
Los organigramas funcionales deben ser flexibles, capaces de sumar nuevas funciones o departamentos a medida que la empresa crece. Aunque puede ser rígido, lo más adecuado es que permita este tipo de ajustes para adaptarse a cambios en la estructura organizativa.
Dichos organigramas mejoran la eficiencia operativa al asignar tareas específicas a departamentos especializados y proporciona una visión clara de quién es responsable de qué, reduciendo la confusión y los conflictos de responsabilidad. Además, permite a los y las líderes supervisar y gestionar mejor sus equipos y departamentos. Y facilita la evaluación del desempeño y la implementación de estrategias de mejora.
Los organigramas funcionales suelen representar con claridad departamentos como los de : contabilidad, tesorería, producción, logística, gestión de calidad, marketing y publicidad, investigación de mercados, relaciones públicas, recursos humanos, infraestructura IT, soporte técnico…, así como a las personas que ostentan las gerencias, que son la cabeza visible de cada departamento y, claro está, al Director General o CEO.
Cada uno de estos departamentos puede ir acompañado en el organigrama con sus funciones específicas, clarificando aún más la información acerca de las distintas áreas funcionales de la empresa.