Organigrama de una empresa

Cultura organizacionalGestión del talento

Un organigrama empresarial u organigrama de una empresa es la representación visual de los equipos de trabajo que operan en el seno de esta. Algunos de hecho, recogen incluso las tareas y responsabilidades específicas de algunos de ellos, así como sus líderes o personas responsables, quienes reportan directamente a la persona CEO de la compañía.

Existen diferentes tipos de organigramas en una empresa: funcionales, horizontales, verticales, matriciales, circulares, etcétera.

Claves del organigrama de una empresa

Un organigrama empresarial representa, además, los niveles jerárquicos adoptados dentro de la organización, así como los flujos de comunicación y reporte, y la corresponsabilidad organizacional. Todo dependerá del tipo de organigrama empresarial que adopte la empresa. Este responderá, a su vez, a la cultura corporativa desarrollada e implantada en la misma.

Los tipos de organigramas empresariales no son estáticos, evolucionan con el paso de los años para dar respuesta a los nuevos desafíos del mercado y a las necesidades y expectativas sociales, dando lugar a la aparición de nuevos organigramas empresariales.

De hecho, mientras que los primeros organigramas empresariales eran totalmente verticales, estáticos y protagonistas de un flujo comunicativo que seguía una dirección ascendente, una especie de pirámide en cuya cúspide estaría el rol de CEO y en la base, los trabajadores y trabajadoras menos cualificados; hoy en día las empresas adoptan un tipo de organigrama mutable y adaptable a estructuras mucho más complejas.

En los organigramas actuales se pueden representar proyectos concretos en marcha donde los y las profesionales implicados pueden estarlo a su vez en otros proyectos. Se trata, por tanto, de organigramas empresariales eminentemente horizontales y colaborativos, habituales en empresas de carácter tecnológico o innovador.

Un organigrama de una empresa, hoy en día, pretende mostrar la filosofía de empresa y los objetivos de la misma: su espíritu colaborativo, el nivel de cooperación e innovación, las actividades con mayor peso dentro de la empresa, etcétera. Y visualizar, de forma sencilla, las áreas prioritarias dentro de la entidad.

En el contexto de grandes empresas, la implementación de un organigrama mixto se ha convertido en una opción altamente eficaz, pues las líneas de negocio se multiplican y las sinergias entre distintos departamentos son habituales.

Este tipo de organigrama de empresa, también conocido como organigrama matricial o híbrido, combina elementos de la estructura funcional y de otros tipos, creando una red más compleja de relaciones de reporte entre departamentos e incluso entre profesionales. Este tipo de organigrama está diseñado para maximizar la flexibilidad, comunicación y colaboración entre diferentes áreas de la organización.
El organigrama empresarial mixto puede ser una poderosa herramienta para gestionar organizaciones complejas y dinámicas, permitiendo una mayor flexibilidad y colaboración siempre que se adopte una gestión cuidadosa y una comunicación efectiva.

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