Todo sobre el performance management
El performance management o gestión del desempeño se ha colado en el ranking de procesos empresariales que buscan mejorar la productividad y el rendimiento de los empleados y empleadas. Pero no a cualquier precio, sino a través del desarrollo profesional y personal de los talentos, alineando este con los objetivos organizacionales a través de planes de mejora continua.
¿Qué es la gestión del desempeño (performance management)?
El performance management consiste en poner al servicio de los empleados y empleadas todas las herramientas, beneficios y estrategias a su alcance para favorecer el desarrollo de todo su potencial y encaminar este a la consecución de los objetivos corporativos.
Empresas como Deloitte han logrado revolucionar el concepto y, con este, las posibilidades de su fuerza laboral.
Importancia del performance management en las empresas
El performance management es crucial hoy en día para cualquier organización. Lo es porque contribuye a la consecución de los objetivos empresariales a partir de la consecución de objetivos propios. Es decir, el éxito general pasa por el éxito individual, de los grupos de trabajo o de los departamentos, lo cual supone un plus de motivación. Esta es la razón porque las que la hablar de performance management nos referimos de manera indistinta a dos grandes ventajas de este proceso:
- Consecución de beneficios para la organización.
- Impacto en el desarrollo profesional de los empleados y empleadas.
En definitiva, tal y como señala Jen Patterson, de Patterson Consulting Group, experta en liderazgo inspiracional, “una oportunidad para ayudar a los empleados a sincronizar sus esfuerzos con los objetivos estratégicos de la empresa”.
De hecho, entre los beneficios de una gestión del desempeño eficaz para las organizaciones destacan los cuatro siguientes:
- Aumento de la productividad.
- Mejora en la toma de decisiones.
- Reducción de la rotación de personal.
- Incremento de la rentabilidad.
En definitiva, cuatro de los desafíos y factores clave para cualquier organización que quiera apuntalar su competitividad y sostenibilidad en el tiempo.
Componentes clave del performance management
Entre los componentes clave a la hora de definir esa estrategia de performance management, podemos citar tres elementales:
Establecimiento de objetivos: metas SMART y OKR
Delimitación de objetivos estratégicos concretos y medibles a nivel organizacional, departamental e individual. Puede emplearse la metodología OKR (Objectives & Key Results) o el modelo SMART para garantizar claridad, un enfoque común y una alineación vertical y horizontal que permee en todas las capas de la organización.
Evaluación del desempeño: métodos y KPIs
Se pueden emplear diversas metodologías en evaluación de desempeño como las de tipo 360°, las autoevaluaciones y las evaluaciones por resultados (superiores-subordinados), integrando datos objetivos y de percepción organizacional para una valoración del rendimiento que incluye indicadores de evaluación cuantitativos (KPI) y cualitativos (empatía, liderazgo…).
Algunos de los indicadores clave de rendimiento (KPI) en la gestión del desempeño que pueden tomarse en cuenta son la tasa de rotación de personal, el nivel de absentismo y los tipos de contratos y su impacto.
Sistemas de incentivos y recompensas
El uso de mecanismos de reconocimiento y compensación vinculados al desempeño y gestión diferenciada del talento resultan muy efectivos. No solo permite motivar al talento, sino impulsar su compromiso.
Estos últimos están muy ligados al desarrollo de una cultura organizacional y gestión del desempeño basadas en el reconocimiento y motivación de empleados y empleadas. La creación de una cultura de desempeño precisa, eso sí, de que el papel de los líderes en la motivación y el reconocimiento aumente, colocándose en el epicentro de la estrategia de gestión del talento.
Alineación de objetivos individuales con los organizacionales
Para un CEO o líder organizacional, el performance management no representa una herramienta operativa aislada, sino un motor estratégico de transformación organizacional. Su adecuada implementación impacta en la productividad, pero también en la capacidad de innovación y en la sostenibilidad del negocio. Para lograr el éxito en esta hazaña, las empresas deben invertir en dos conceptos clave:
Estrategias para lograr la alineación
El performance management debe ir más allá de la evaluación. A partir de los resultados, debe procurar el diseño de planes de desarrollo individual (PDI), iniciativas de reskilling/upskilling, programas de alto potencial…, con un enfoque en una estrategia conjunta, alineada con los propósitos y valores de la empresa.
Herramientas y software de RR.HH. para facilitar el proceso
Estas permiten una gestión moderna y adaptada del desempeño, con un enfoque mucho más ágil y continuo, capaces de garantizar el seguimiento de la estrategia a partir del feedback bidireccional, indispensable en los procesos de performance management, y el coaching en tiempo real, fortaleciendo la adaptabilidad y la mejora continua.
Implementación efectiva de una estrategia de gestión del desempeño
Un performance management eficaz está arraigado en la cultura organizacional y en una employee experience coherente. Por eso, ha de fomentar la transparencia, la responsabilidad compartida y el sentido de propósito, consolidando un entorno donde el rendimiento y el bienestar coexistan. De hecho, hoy en día, una implementación efectiva pasa por:
- Una atención pormenorizada a todas las etapas de desarrollo: análisis, diseño, ejecución, evaluación y optimización como estrategia para la mejora continua en la gestión del desempeño que permite su revisión y adaptación constante.
- La adopción de enfoques modernos y alineados con las tendencias actuales, es decir, con términos como los de bienestar corporativo, salud física, mental, social y emocional, propósito, RSC, etc.
La incorporación de feedback como herramienta fundamental para esa mejora continua e impulso del desarrollo es otra de las acciones necesarias para esa implementación efectiva de la estrategia en gestión de desempeño en cualquier empresa.
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