7 hábitos saludables en el trabajo que puedes implantar en tu compañía
A estas alturas, poca duda cabe sobre la importancia de los hábitos saludables en el trabajo. Tomarlos en consideración contribuye de manera decisiva al bienestar de empleadas y empleados. Y no solo en un escenario laboral concreto, sino en el personal. Y es que, sus beneficios (los físicos, psicológicos, sociales y/o emocionales) trascienden el espacio profesional para extenderse a todas las facetas de la vida de una persona. No en vano, la presente década destaca por el impulso que desde las empresas se da a los planes de vida saludable en el trabajo. Estos últimos mejoran la calidad de vida de las personas y la calidad del desempeño en las organizaciones.
¿Qué son los hábitos saludables en el trabajo?
Se conoce como hábitos saludables en la empresa aquellas rutinas que incorporan trabajadores y trabajadoras dentro de su jornada laboral y espacio de trabajo para mejorar su calidad de vida dentro y fuera de este.
¿Por qué fomentar una vida saludable también es responsabilidad de la empresa?
Adoptar hábitos de vida saludable en el trabajo es posible si la organización lo permite y lo promociona. Es decir, si pone los medios físicos necesarios para ello, si fomenta el espíritu del autocuidado desde la formación, etcétera. La empresa es así responsable de que los hábitos saludables en la empresa sean posibles. La propia iniciativa de los empleados y empleadas, su conciencia sobre el autocuidado, es fundamental, pero irrelevante si no encuentran el apoyo necesario por parte de la organización.
Beneficios de los hábitos saludables para empleados y organizaciones
Los beneficios de las prácticas saludables en el trabajo son muchos y recalan a partes iguales en los intereses de la plantilla y de la propia empresa.
De hecho, la promoción de la salud dentro de las organizaciones hace tiempo que se desligó de la mera normativa de prevención de riesgos laborales. Ahora se trata de conseguir el mayor bienestar posible en las plantillas y, por tanto, en la población trabajadora y en la sociedad. El papel de las organizaciones en pro de la salud de las personas a todos los niveles es decisivo y, con esta, de su capacidad para aumentar el desempeño de los y las trabajadoras.
Principales hábitos de vida saludable en el entorno laboral
Los hábitos saludables en el trabajo incluyen rutinas muy variadas, que afectan a diversas facetas relacionadas con la salud y el bienestar de las personas. Tres de esos principales hábitos, que toda empresa puede potenciar, son:
Alimentación equilibrada: snacks saludables en la oficina
¿Cómo? Facilitando menús saludables en los comedores corporativos, repartiendo cestas con piezas de fruta por las oficinas, ofreciendo posibilidades de vending alternativas y sanas, facilitando beneficios como el ticket restaurante para quienes desean comer fuera, a buen precio y de forma saludable, etc.
Descansos activos y pausas conscientes
Hasta hace bien poco se trataba de un hábito poco común. Ahora, sin embargo, se fomenta desde las empresas para evitar lesiones musculoesqueléticas, responsables de buena parte de las bajas laborales en nuestro país. Se trata de mantenerse físicamente activo a través de pausas y estiramientos durante la jornada laboral.
Ergonomía y postura corporal
Mantener una buena postura y ergonomía es de vital importancia para evitar lesiones. Es necesario, para ello, que la empresa apueste por equipos y mobiliario diseñado para facilitar el descanso y una buena higiene postural. También lo es formar a la plantilla sobre hábitos adecuados al respecto.
Gestión del estrés y desconexión digital
Gestionar el estrés es de vital importancia hoy en día para garantizar una buena salud mental. Propiciar espacios para la relajación y el descanso, establecer límites saludables entre la vida laboral y personal a través de la desconexión digital, facilitar servicios como la atención psicológica 24/7, etc, todo suma al respecto.
A los anteriores podríamos sumar otros tres de gran importancia: fomentar la hidratación constante y adecuada, impulsar la actividad física mediante planes específicos para ello y beneficios que faciliten su ejercicio, y el fomentar un ambiente de trabajo comunicativo y colaborativo, donde el compañerismo sea una característica inherente a la actividad profesional.
Cómo promover hábitos saludables en la empresa
Para poner en marcha dichos hábitos saludables en el trabajo, es necesario articular una estrategia que apueste de manera decisiva a su incorporación en la rutina diaria de la plantilla. ¿Cómo? Mediante herramientas tales como:
- Campañas internas de concienciación.
- Programas de bienestar laboral.
- Incentivos saludables y beneficios corporativos.
- La implicación de los líderes y mandos intermedios.
A diferencia de lo que muchas personas creen, si estas estrategias están bien planteadas, pueden llegar incluso a quienes trabajan desde casa. Este es, de hecho, uno de los grandes retos de los equipos de RRHH hoy en día, lograr que los hábitos saludables en el trabajo puedan aplicarse en un entorno híbrido o remoto.
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