Accidente in itinere: qué es y cómo se regula en la ley
Los accidentes in itinere representaron el pasado año el 12,6 % de los accidentes de trabajo con baja. Este porcentaje supone un aumento del 6,4 % respecto a 2021. Veamos qué se considera exactamente un accidente in itinere y a qué regulación legal está sujeto.
Definición de accidente in itinere
El accidente in itinere es aquel en el que se ve envuelto un empleado o empleada cuando acude o vuelve a casa de su centro de trabajo. Para considerarse como tal, dicho suceso ha tenido que ocurrir en el trayecto habitual a las instalaciones corporativas desde el domicilio o segunda residencia, y dentro de un horario razonable.
Existen otros dos condicionantes en los accidentes in itinere: que este se produzca empleando un medio de transporte idóneo: es decir, habitual y no prohibido por la empresa. Y que haya sido utilizado con cautela, y no de manera imprudente.
Ejemplos de accidentes in itinere
Tendemos a pensar que los accidentes in itinere hacen referencia exclusiva a la colisión, con nuestro vehículo privado, de camino o regreso del trabajo. Sin embargo, existen tres tipos de accidente in itinere:
- Accidentes in itinere por accidente de tráfico, que representan el 61 % del total de accidentes con baja in itinere.
- Accidentes in itinere cuya forma-contacto es un golpe contra objeto inmóvil (con o sin caída).
- Accidentes in itinere por sobreesfuerzo. Este, junto a los anteriores, representan el 30 % del total de accidentes con baja in itinere.
Se considera accidente in itinere de tráfico cualquier accidente con un vehículo a motor, bicicleta o monopatín. Incluso con un medio de transporte público o coche compartido. También se consideran accidentes in itinere los desplazamientos a pie.
Son los conductores y conductoras de entre 16 y 40 años quienes más accidentes in itinere experimentan. Especialmente ellos en el primer rango de edad, de 16 a 19 años, y ellas en los posteriores. La curva de incidencia es progresiva y disminuye en la medida que aumenta la edad de los trabajadores y trabajadoras.
Obligaciones del empleador ante un accidente in itinere
El accidente in itinere está regulado, para los empleados por cuenta ajena, por el artículo 156 de la Ley General de la Seguridad Social. Este presume que la responsabilidad de dicho accidente es de la empresa contratante, pues genera el riesgo asumido por el trabajador o trabajadora en la asunción de sus responsabilidades. Por lo tanto, es la organización la responsable también de su prevención.
La prevención de accidentes in itinere
Como responsable de la prevención de accidentes in itinere, la empresa ha de adoptar medidas adecuadas para evitarlos. En este sentido, la compañía puede adoptar diversas medidas eficaces. Destacamos tres de ellas:
- Facilitar a los empleados y empleadas un servicio de renting que les proporcione una gama de vehículos seguros.
- Poner a su servicio el ticket transporte a través de un plan de retribución flexible. El objetivo: fomentar el uso del transporte público y ayudar a la plantilla a disminuir sus costes fijos diarios.
- Diseñar para todos y todas las profesionales itinerarios de movilidad segura para acudir al centro de trabajo.
- Facilitar una jornada flexible que permite a los equipos de trabajo una mayor conciliación, para evitar conducir rápido hacia el trabajo, por ejemplo; así como evitar las horas punta de tráfico en grandes ciudades.
Indemnización por accidente in itinere: cómo se calcula y cómo reclamarla
Siempre y cuando el accidente in itinere se considere accidente laboral y genere en el empleado o empleada bien lesiones permanentes no invalidantes, bien incapacidad permanente, este podrá reclamar una indemnización. Esta será de:
- 52 euros al día por pérdida de calidad de vida moderada.
- 75 euros al día más días de hospitalización por pérdida de calidad de vida grave.
- 100 euros al día y cobertura de gastos médicos por pérdida de calidad de vida muy grave.
De lo contrario, el o la profesional podrá solicitar la baja: del 75 % de la base de cotización desde el primer día hasta el último. Este se cumplirá a los 365 días de tener lugar el accidente, con posibilidad de ampliarlos otros 180 días si la Mutua así lo considera al evaluar las lesiones y/o estado de salud. Transcurrido ese periodo, el trabajador o trabajadora tendría que someterse a un Tribunal Médico.
Si el accidente in itinere es de tráfico, lo más habitual, podemos reclamar indemnizaciones compatibles siempre y cuando el empleado o empleada no sea culpable del incidente.
Tanto la baja como la indemnización deben gestionarse a través de la mutua laboral de la empresa.
Diferencia entre accidente in itinere y accidente laboral
Debemos de tener claro que los accidentes in itinere son accidentes laborales siempre y cuando respondan a los condicionantes detallados más arriba. Por lo tanto, aglutinan los mismos derechos y nivel de protección que cualquier otro tipo de siniestro profesional.
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