Qué es la deflactación del IRPF y cómo afecta a mi nómina
En los últimos meses la preocupación macroeconómica se ha centrado en la evolución de la inflación. Tras el fin de las restricciones por la pandemia y el inicio de la guerra de Rusia contra Ucrania, los precios viven una espiral alcista que ya ha llevado la inflación a superar el 9% interanual en septiembre, según el INE.
Esta situación se está convirtiendo en un cuello de botella para las empresas y administraciones, ya que los salarios no dejan de perder poder adquisitivo al no actualizarse al mismo ritmo que sube la vida. ¿Y cuál es la solución planteada en estos momentos? Algunas Comunidades Autónomas sugieren la posibilidad de deflactar los tramos autonómicos del IRPF. Te explicamos en qué consiste esta fórmula.
Cómo influye la inflación en mi nómina
La subida de los precios de los últimos meses está desembocando en una creciente pérdida de poder adquisitivo por parte de todos los trabajadores y trabajadoras. Es decir, cada vez tienen menos capacidad de gasto o ahorro porque con el mismo salario han de hacer frente a productos y servicios mucho más caros que hace un año. Y el ejemplo es claro: mientras el IPC ha subido un 9%, los salarios brutos han crecido un 4,3%, según la última encuesta de costes laborales del INE.
Eso sí, los últimos datos del INE dejan entrever una relajación de esta subida de precios, ya que aunque el IPC sigue en el 9% en septiembre, supone un punto y medio menos que en agosto.
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El verdadero quebradero de cabeza de la economía se está centrando en el precio de la luz, el gas o los carburantes. Para estos últimos, el Gobierno aprobó la subvención directa de 20 céntimos por litro, mientras que para mitigar la evolución alcista de la electricidad y el gas se han desarrollado diferentes medidas, como el plan de ahorro energético, la reducción del IVA, la fijación del tope del precio del gas o el cheque de 200€ para las personas con menos recursos.
Pese a la batería de medidas, la inflación sigue distorsionando la capacidad de gasto de los hogares y por eso algunos gobiernos autonómicos, a las puertas del año electoral, están planteando la posibilidad de adaptar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a la situación actual.
Qué significa deflactar el IRPF
En las últimas semanas la deflactación del IRPF ha sido una de las medidas más debatidas en las Comunidades Autónomas. El sistema fiscal español reparte la recaudación entre diferentes administraciones y, en el caso del IRPF, este reparto se produce entre el Estado y las regiones.
Por esta razón, algunos gobiernos autonómicos han planteado la posibilidad de llevar a cabo esta deflactación. Pero, ¿qué significa deflactar el IRPF? Supone eliminar los efectos producidos por los cambios en los precios, de tal manera que en vez de tomar la magnitud en términos nominales se tomará en términos reales corrigiendo los valores con los que se fijaban esos tramos del IRPF.
De esta manera, la deflactación modifica los tramos del IRPF para ajustar la progresión del impuesto a la progresión del coste de la vida. ¿Y esto que supone? Que aunque cobremos un poco más por las subidas salariales que puedan producirse, seguiremos pagando el mismo porcentaje de IRPF.
De no producirse esta deflactación, si una persona tiene una subida de salario en estos meses para intentar acercarse a la evolución del IPC, tendría que pagar proporcionalmente más impuestos, lo que haría que, a pesar de tener más salario, tuviera menos capacidad adquisitiva al tener que destinar más dinero al pago de tributos.
El IRPF tiene un carácter progresivo por lo que esta medida tiene un efecto más notorio cuanto más dinero se gane ya que a mayor salario, mayor porcentaje de tributación. Aún así, existen otras muchas medidas que ayudan al contribuyente a reducir su IRPF cada año, entre las que destacan la posibilidad de apostar por métodos de compensación como la Retribución Flexible, que ayudan a minorar la carga tributaria anual.
Cómo influye la deflactación a los tramos del IRPF
Hasta el momento, la Comunidad de Madrid, Andalucía y País Vasco han anunciado que llevarán a cabo esta deflactación del IRPF de cara a la campaña de la Renta 2022. Por su parte, el Gobierno de España de momento asegura que mantendrá los tramos tal y como están en su parte estatal, aunque están analizando la posibilidad de crear tributos para grandes patrimonios o aligerar la carga fiscal a las rentas más bajas, aún por determinar.
Así todo, teniendo en cuenta la configuración actual de los tramos autonómicos, las escalas más bajas ahorrarían de media 19€ al año, frente a los 110€ de las rentas más altas. A estos ahorros, habría que sumar también las posibles deducciones fiscales a las que pueden atenerse los y las contribuyentes.
En concreto, la Comunidad de Madrid ha confirmado la deflactación del 4,1% para los tramos del IRPF autonómico que le competen, de tal manera que quedarán fijados de la siguiente forma:
BASE LIQUIDABLE HASTA € | CUOTA ÍNTEGRA EUROS | RESTO BASE | TIPO APLICABLE PORCENTAJE |
0 | 0 | 12.960,45 | 8,50% |
12.960,45 | 1.101,63 | 5.472,74 | 10,70% |
18.433,19 | 1.972,35 | 15.927,30 | 12,80% |
34.360,49 | 4.398,14 | 21.241,40 | 17,40% |
55.601,89 | 9.674,72 | En adelante | 20,50% |