Planes de pensiones en 2025: ventajas, inconvenientes y qué ha cambiado
Si has aterrizado en esta página es porque los planes de pensiones te empiezan a interesar. No es para menos. Un plan de pensiones es una herramienta perfecta para ahorrar a largo plazo. Una forma de ir construyendo un colchón económico del que disfrutar llegada la jubilación.
Sin embargo, los planes de pensiones también tienen sus claroscuros. Es decir, ventajas pero también inconvenientes que debes conocer.
Ventajas de un plan de pensiones
Como habrás podido saber, los planes de pensiones se asientan sobre un sistema de aportaciones periódicas. Como trabajador, puedes destinar una parte del sueldo mensual a tu plan de pensiones, a ese colchón de ahorro, o hacerlo de manera puntual. Cómo hacerlo dependerá del plan de pensiones que suscribas y sus condiciones.
Pero ¿Cuáles son las ventajas de los planes de pensiones? ¿Por qué se han convertido en un producto estrella para los trabajadores? Te lo contamos.
Ahorro fiscal: cómo funciona la reducción en IRPF y los topes de 2025
Las cantidades aportadas al plan de pensiones pueden ser desgravadas por el trabajador en la declaración de la renta. Esto se debe a que, al ser descontadas directamente de la nómina, reducen la base imponible, facilitando el ahorro fiscal en función de la retención del IRPF.
Conviene tener en cuenta los límites vigentes que marca la Agencia Tributaria:
- Hasta 1.500€ de reducción de la base imponible anualmente.
- Hasta 10.000€ anuales si existen contribuciones empresariales (a través de un plan de empleo).
Cuando quieras rescatar el plan de pensiones, es decir, disfrutar del capital acumulado, tendrás que tributar dicha cantidad en el IRPF en concepto de rendimiento del trabajo.
Diferimiento de impuestos: tributas al rescatar
A la hora de contratar un plan de pensiones es importante tener en cuenta algo: no vas a tributar por esas aportaciones cuando se realizan, sino cuando rescatas el plan y recibes el dinero acumulado.
Es clave que sepas entonces cómo y cuándo rescatar ese plan:
- Si lo haces en un solo pago, es más probable que generes un tramo elevado de IRPF y por lo tanto tengas que pagar más impuestos.
- Si lo recibes en varios pagos o incluso en forma de renta va a tener menos impacto en la base imponible.
Trasladar correctamente al equipo estas condiciones aporta más tranquilidad y transparencia para tomar una decisión.
Ahorro sistemático y disciplina
Tener un plan de pensiones es útil para inculcar y fomentar el ahorro constante a largo plazo. Al descontar de la nómina directamente estas aportaciones se establece un hábito de ahorro para poder construir un capital de cara al futuro.
Estas aportaciones disfrutan de interés compuesto: es decir, los rendimientos no aumentan solamente el capital inicial sino que se reinvierten para generar nuevos rendimientos. Esto puede marcar la diferencia en el capital final cuando se rescate el plan de pensiones, sobre todo si se ha comenzado a ahorrar pronto.
Por ejemplo:
- Si un empleado aporta 100€ al mes durante 30 años, con un plan de pensiones con un rendimiento medio del 4% tendrá un capital acumulado de 81.000€ a la hora de rescatarlo.
- Sin embargo, si comienza 10 años más tarde, con las mismas condiciones, el capital final sería de 46.000€.
Inconvenientes y riesgos que debes valorar
En los planes de pensiones también encontramos peros. Sin embargo, una persona experta en la materia te dirá que no son lo suficientemente representativos como para no apostar por este producto de ahorro. Aún así, te indicamos algunos de los más recurrentes:
Liquidez limitada… con excepción 2025: rescate a los 10 años de antigüedad
Los planes de pensiones tienen una liquidez limitada. Es decir, no se pueden rescatar cuando el beneficiario quiera. Tradicionalmente, los fondos se podían recibir en casos concretos como jubilación, desempleo de larga duración o enfermedad grave.
Sin embargo, el 1 de enero de 2025 se aprobó el Real Decreto 62/2018 que dictamina que se podrán rescatar las aportaciones realizadas con al menos 10 años de antigüedad. Así que en caso de necesitarlo, las personas que tengan un plan de pensiones desde hace más de 10 años podrán recibir el capital.
Costes: comisiones máximas legales y su impacto en la rentabilidad
Los planes de pensiones tienen una serie de costes asociados que influyen en la rentabilidad final del producto. Son principalmente comisiones de gestión y de depósito. La buena noticia es que está regulado y existen unos máximos legales.
Para que tanto tu como el equipo podáis hacer cálculos, la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP) ha dictaminado que sean:
- Comisión de gestión:
- 0,85% anual para planes de renta fija.
- 1,30% para planes renta fija mixta (con menos del 30% de renta variable).
- 1,50% para el resto de planes.
- Comisión de depósito: 0,20% anual.
Ten en cuenta que aunque puedan parecer bajas pueden impactar de forma significativa en la rentabilidad acumulada, sobre todo si es de varias décadas.
Cómo optimizar fiscalmente (sin sorpresas al rescatar)
Rescatar el plan de pensiones es un punto crítico a la hora de disfrutar el producto. Existe formas de hacerlo de manera un poco más ventajosa fiscalmente. Te las contamos:
Escalonar el cobro: renta y/o capital para no saltar de tramo
Como hemos visto anteriormente, solo tributas por el capital generado por el plan de pensiones cuando lo rescatas. Por lo tanto, si lo haces de golpe, la cantidad sobre la que tienes que pagar impuestos será más elevada, por lo tanto se le aplicará un tramo de IRPF más alto.
Por ello, lo aconsejable siempre es combinar el rescate de capital con rentas periódicas de cantidades más pequeñas, de forma que el importe anual percibido no provoque que el empleado entre en un tramo superior de IRPF.
Se pueden simular varios escenarios para calcular cuál sería la tributación y poder tomar una decisión.
Reducción del 40%: cuándo aplica
Otra ventaja fiscal a tener en cuenta es la reducción del 40% sobre las aportaciones realizadas antes del 31 de diciembre de 2006, porque solo es aplicable cuando se realiza el rescate en forma de capital. Es decir, esta reducción permite tributar solo sobre el 60% del importe rescatado, de forma que se disminuye la factura fiscal.
Si tu equipo quiere hacerlo debe consultar las reglas y plazos asociados a esta ventaja y revisar calendarios y condiciones vigentes para asegurarse de cumplir los requisitos.
Si tienes plan de empleo (o puedes implantarlo en tu empresa)
Un plan de empleo es un sistema de ahorro promovido por la propia empresa para sus empleados, y su objetivo es complementar las pensiones públicas. Es decir, los planes de empleo suelen ser planes de pensiones. Te explicamos en qué consiste:
Por qué los planes de empleo mejoran el tope (hasta +8.500 €) y fomentan el ahorro complementario
Los planes de empleo tienen una ventaja fiscal significativa que no tienen los planes individuales, y es que permite incrementar el límite de la reducción de la base imponible hasta 8.500€ adicionales, pudiendo llegar a los 10.00€ cuando se combina con las aportaciones individuales.
Los planes de empleo fortalecen la cultura financiera dentro de la organización, promoviendo el hábito de ahorro a largo plazo. En la Ley 12/2022 y el RD 1086/2024 se establecen las condiciones, límites y obligaciones para empresas y empleados.
Qué pedir al proveedor: comisiones, arquitectura abierta, información clara y reporting
Para maximizar el valor del beneficio, a la hora de buscar proveedor debes tener en cuenta:
- Comisiones transparentes y competitivas, que no sobrepasen los máximos legales
- Flexibilidad, que te permita seleccionar distintos fondos y opciones según el perfil del empleado
- Información clara sobre la evolución de los fondos y costes
- Reporting detallado, para poder hacer seguimiento de los planes
Preguntas clave antes de decidir
Para ajustar el plan al perfil de riesgo del empleado y que encaje con sus necesidades, te recomendamos que te hagas las siguientes preguntas:
¿Cuál es tu horizonte (y si necesitarás liquidez antes)?
Los planes de pensiones están diseñados para ser recibidos a largo plazo. Por lo tanto, si existe la posibilidad de necesitar liquidez en menos de 10 años, quizá no sea el tipo de plan adecuado. Por ello, es necesario valorar alternativas o escenarios de rescate anticipado.
¿Qué coste total asumes (TER) y qué alternativa tendrías con el mismo riesgo?
Es importante conocer el coste total del plan (TER) para evaluar el impacto final sobre la rentabilidad. Puedes comparar distintos perfiles de riesgo para valorar y tomar decisiones informadas.
¿Cómo y cuándo rescatarás para pagar menos impuestos (sin “picos”)?
La planificación del rescate es la clave. Escalonar los cobros en renta; considerar, si aplica, la reducción de 40%… simular distintos escenarios ayudará a simplificar la tributación y evitar sorpresas fiscales.
¿Ya sabes todo lo que necesitas para poner en marcha tu Plan de Pensiones de Empleo?
Si necesitas ayuda para definir tu plan y las posibles aportaciones, ¡estamos a tu disposición! Reúnete con nuestros expertos.

