Bienestar laboral

Beneficios para empleados

El concepto de bienestar laboral está ligado a un estado de salud global biopsicosocial en el entorno de trabajo. Es decir, se refiere a ese estado en el que la persona se siente segura, comprendida, respetada y respaldada en su actividad diaria. Así, el bienestar laboral suele ser consecuencia de un ambiente de trabajo que facilita la consecución de los objetivos corporativos y que impulsa, para todo empleado y empleada, el desarrollo profesional y personal a todos los niveles: físico, mental y emocional.

Hoy en día, hablar de bienestar laboral es hacerlo no solo de condiciones ventajosas en el centro de trabajo, sino de toda una estrategia que redunda en una mayor calidad de vida de los y las profesionales, también fuera de las instalaciones corporativas, y en un aumento de la competitividad de la organización.

La Organización Mundial de la Salud, OMS, considera un entorno de trabajo saludable “aquel en el que los trabajadores y jefes colaboran en un proceso de mejora continua para promover y proteger la salud, seguridad y bienestar de los trabajadores y la sustentabilidad del ambiente de trabajo”.

Para la Organización Internacional del Trabajo, OIT, “el tiempo dedicado al desarrollo de asociaciones para mejorar la salud y el bienestar en el trabajo es una inversión en el activo más importante de cualquier empresa u organización: sus trabajadores. También es una inversión en el contexto social en el que opera una empresa u organización y, por tanto, en su futuro y el futuro de la comunidad y el país en su conjunto”.

Claves del bienestar laboral

Toda persona tiene derecho a ser libre y a buscar la felicidad y bienestar. Sin embargo, esta premisa se ha visto coartada, para muchos talentos, al llegar a su centro de trabajo. Hoy en día, existe una gran conciencia al respecto. Tanto es así que cada vez son más las empresas que se suman a la Red Española de Empresas Saludables con el fin de garantizar el bienestar laboral a distintos niveles en sus plantillas, es decir, no solo a nivel colectivo, sino individual.

Porque el bienestar laboral significa gestionar adecuadamente la salud de los y las trabajadoras desde todos los aspectos posibles: actividad física, alimentación saludable, bienestar emocional, conciliación de la vida personal, familiar y laboral, inclusión, gestión de la edad, detección precoz del cáncer, seguridad vial laboral y un largo etcétera.

Así, el bienestar laboral del empleado y la empleada se ha convertido en un factor clave para las empresas. De hecho, forma parte del ADN y cultura organizativa de muchas de ellas. No en vano, el rendimiento de las plantillas, su dedicación y compromiso, depende en buena medida de este. También la capacidad de la organización de atraer a nuevos talentos.

No en vano, garantizar el bienestar laboral a través de planes globales y acciones específicas trae consigo hitos como:

La lucha contra síndromes comunes como el estrés laboral o el burnout laboral.
La disminución del ausentismo, la accidentalidad y el número de bajas temporales.
El aumento en el nivel de satisfacción y de felicidad en el puesto de trabajo.
Mayores posibilidades de captar talento por la mejora del employer branding.
El incremento de la capacidad de retención de profesionales, disminuyendo tasas de rotación excesivamente altas.
Un mayor nivel de productividad y eficiencia, también de cooperación y de trabajo en equipo.

Así pues, el diseño de los planes de bienestar laboral a medida, flexibles y personalizados se torna indispensable en los departamentos de RRHH.

Estos últimos no solo deben trabajar en el ámbito de la mejora de la salud y bienestar de sus trabajadores y trabajadoras, sino en el compromiso de promover una cultura del cambio y de la proactividad hacia hábitos de vida saludables dentro y fuera de la organización.

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