Qué son los seguros sociales
Los seguros sociales son aquellas aportaciones económicas que trabajadores, trabajadoras y empresas hacen al sistema de la Seguridad Social, bien a través de la nomina mensual bien a través del ingreso de una cuota, dependiendo de si se trata de personas empeladas por cuenta ajena o por cuenta propia.
Dichos seguros sociales tienen por objeto contribuir a un sistema de salvaguarda, es decir, que trata de proteger a los trabajadores y trabajadoras ante situaciones que les impide trabajar, sea o no sobrevenidas, o llegado el momento de la jubilación mediante prestaciones económicas. Por ejemplo, una baja por cuidado de menor, una situación de desempleo, una incapacidad o la jubilación.
La empresa es la responsable del ingreso de la cotización propia y de la de sus trabajadores y trabajadoras, para lo cual procede a descontar de la nómina mensual la aportación que corresponda.
Claves de los seguros sociales
El cálculo de los seguros sociales depende del salario del trabajador o trabajadora, los conceptos por lo que cotiza (contingencias comunes, contingencias profesionales) y los porcentajes aplicable en cada caso.
En otras palabras, la cuota a la Seguridad Social se calcula aplicando unos tipos porcentuales, que son fijados por ley en los presupuestos del Estado y varían cada año, sobre una base de cotización, y esta última se determinan en función de la retribución que mensualmente recibe el trabajador y trabajadora, comprendida entre un importe mínimo y máximo, en función de su grupo o categoría profesional. A mayor grupo de cotización, mayor es el importe mínimo.
Existen reducciones y bonificaciones de dichas aportaciones a la Seguridad Social. Estas se establecen por normativa y pueden variar con el paso de los años.
Toda persona que esté dada de alta en cualquier de los Regímenes de la Seguridad Social, empleada por cuenta ajena o por cuenta propia, debe cotizar, es decir, realizar dichas aportaciones, cuya cuantía está sujeta a unas determinadas bases con referencia al salario bruto.
En toda nómina aparecerá la base de cotización, el tipo aplicado y la aportación que realiza la empresa al respecto.
Conocer las bases de cotización es importante porque de estas depende el cálculo de cualquiera de las acciones protectoras a las que tienen derecho los y las profesionales, tanto en el momento actual como en el futuro. Por ejemplo, la prestación por nacimiento de hijo o hija, la jubilación contributiva o una incapacidad. Cotizar también garantiza el derecho a los servicios sanitarios públicos.