La crianza consciente: definición, beneficios, estrategias prácticas y recursos útiles para padres
La crianza consciente ha tomado relevancia en la última década. Y lo ha hecho tras comprobarse los beneficios que acarrea una crianza que inspira seguridad en uno mismo y un arraigado sentido de pertenencia. La crianza consciente no solo empodera a los niños y niñas, sino a quienes serán personas adultas con grandes responsabilidades.
Tabla de contenidos
- ¿Qué es la crianza consciente?
- Principios fundamentales de la crianza consciente
- Beneficios de la crianza consciente
- Estrategias para implementar la crianza consciente
¿Qué es la crianza consciente?
Entendemos por crianza consciente aquella forma de educar para satisfacer las necesidades del menor a cargo, entendidas estas como las de: afecto, seguridad y sentimiento de pertenencia.
Una forma de educar, la crianza consciente, que pone énfasis en valores emocionales, o habilidades blandas, como pueden ser la comunicación positiva, la bondad, la tolerancia, la sensibilidad, la receptividad… Sin menospreciar aquellas reglas y límites que los niños y niñas necesitan para desarrollarse plenamente.
Una crianza consciente es una herramienta fundamental para hacer del menor una persona segura de sí misma en el futuro, empática, tolerante y responsable. En definitiva, para reducir los problemas relacionados con la salud mental y emocional en el presente y en el futuro.
Principios fundamentales de la crianza consciente
La crianza consciente o positiva significa el fin de la crianza autoritaria. De hecho, son principios fundamentales de la crianza consciente los siguientes:
- La conciencia emocional, es decir, la facultad para detectar nuestras propias emociones y las de los menores con el fin de actuar en consecuencia.
- Atención plena (mindfulness), a través de una comunicación activa donde tiene cabida el feedback constructivo.
- Empatía y comprensión como capacidad de ponernos en la piel del menor antes de juzgarle y soluciones conflictos de forma eficaz.
- Comunicación efectiva y respetuosa, que sitúe a la persona adulta y al menor en un plano horizontal y poder así construir relaciones constructivas.
Estos principios fundamentales de la crianza consciente precisan, por tanto, del desarrollo de competencias cognitivas, emocionales y sociales.
Beneficios de la crianza consciente
Los beneficios de la crianza consciente se dejan ver durante la infancia y en la edad adulta, pues moldean el comportamiento y la personalidad, aportando las siguientes ventajas:
Desarrollo emocional saludable
El impacto en el desarrollo infantil es evidente en tanto en cuanto que son los primeros años de vida durante los cuales se forma una persona a nivel físico, emocional, cognitivo y social. De hecho, la crianza consciente permite a las familias entender mejor las necesidades y el comportamientos de sus hijos e hijas, propiciando un apoyo más acertado.
Mejora en la comunicación familiar
Los conflictos en las familias son una constante, la mayoría de las ocasiones se producen por la falta de comunicación, de entendimiento mutuo o por la adopción de roles basados en relaciones piramidales. La crianza consciente fomenta una comunicación positiva como un flujo consciente en todas las direcciones, facilitando el entendimiento gracias a la dotación de herramientas para ello.
Fortalecimiento del vínculo entre padres e hijos
Como consecuencia a los dos puntos anteriores, las relaciones entre padres e hijos se tornan más transparentes, respetuosas y empáticas. Es decir, se fortalecen. En parte porque facilita nuevos roles y modelos de comportamiento que permiten la coherencia y una crianza más participativa.
En definitiva, la crianza consciente es una inversión a largo plazo que previene los abusos, incluso los inconscientes, y que permite a las familias adaptarse a los cambios constantes que supone la convivencia con menores.
Estrategias para implementar la crianza consciente
Actualmente, existen estrategias predeterminadas que permiten a las familias adoptar una crianza consciente:
- Técnicas de mindfulness para padres e hijos, guiadas por especialistas para asentar las bases de una crianza responsable y consciente, con enormes beneficios prácticos para las familias y , en especial, para los niños y niñas.
- Prácticas diarias para fomentar la conexión emocional, a través de sesiones grupales dirigidas o de manera individual, con pequeñas acciones diarias, como el hecho de compartir momentos de ocio en familia que satisfagan a todas las partes.
- Manejo de emociones y conflictos. Sesiones que, desde la psicología positiva, permiten identificar y modular las emociones para prevenir y resolver conflictos de manera adecuada.
La crianza consciente permite asentar las bases de una buena salud emocional y psicológica, de relaciones sociales más justas y equitativas. Reduce además la posibilidad de desarrollar episodios de estrés, ansiedad o enfermedades como la depresión. En definitiva, supone el desarrollo de personas más felices y empoderadas.