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Cómo gestionar la baja laboral y qué supone para una empresa

Cobee Team |

Se calcula que más de un millón de personas no acuden a su puesto de trabajo de media cada día en España, según Randstad, y que el 73,6 % lo hacen por incapacidad temporal. 

Estas últimas, las bajas laborales por incapacidad temporal, se dispararon entre diciembre de 2021 y enero de 2022 a causa de la covid-19. En ese periodo de tiempo, se contabilizaron más de 2,4 millones de bajas laborales según datos del Instituto Nacional de la Seguridad Social recogidos por Infojobs.

Pero ¿cómo gestionar la baja laboral? Arrojemos algo de luz sobre las bajas laborales: en qué consisten, qué tipos existen y qué podemos hacer para solicitarlas.

En qué consiste la baja laboral

Una baja laboral es un tipo de absentismo temporal del trabajador o trabajadora en su empresa. Ocurre cuando el empleado no acude al centro de trabajo porque no puede desempeñar sus funciones correctamente durante un determinado lapso temporal. 

Las causas pueden ser diversas, la mayoría relacionadas con motivos de salud, tanto física como mental, o con accidentes. A estos casos había que sumar la baja laboral que se concede por maternidad o paternidad, así como por acogimiento familiar temporal, adopción o guarda preadoptiva.

¿A qué nos referimos con IT cuando hablamos de baja laboral?

A una situación de baja laboral le corresponde lo que se conoce como Incapacidad Temporal (IT), un subsidio diario que trata de cubrir la pérdida de renta mientras el trabajador está imposibilitado. Esta IT está supeditada al reconocimiento y asistencia sanitaria por parte de la Seguridad Social.

Este subsidio se concede al cuarto día de baja laboral en el caso de enfermedad común o accidente no laboral (contingencias comunes). Para accidentes de trabajo o enfermedades profesionales (contingencias profesionales), tiene lugar desde el día siguiente a la baja.

La duración de la baja laboral en el caso de enfermedad o accidente no puede superar los 365 días. En casos excepcionales, puede prorrogarse a otros 180, siempre que se prevea la curación del trabajador durante ese periodo de tiempo.

¿Quién paga al trabajador y qué cuantía durante la baja laboral?

Como hemos señalado, en el caso de las contingencias comunes, el subsidio se hace efectivo al cuarto día. Eso quiere decir que durante los tres primeros días el trabajador no cobrará, es decir, la empresa descontará esos días al empleado de su salario mensual

A partir del cuarto, y hasta el día 15, esta deberá abonar el 60 % de la base de cotización. Superada esa fecha, y hasta el 21 día, ese 60 % tendrá que ser abonado por la mutua o la Seguridad Social. De ahí en adelante, los responsables del pago seguirán siendo la SS o la mutua, pero la cuantía se elevará el 75 % de la base de cotización.

En el caso de enfermedad profesional o accidente de trabajo, el trabajador tendrá derecho al 75 % de la base reguladora desde el día siguiente al de la baja en el trabajo.

Por cierto, el trabajador no tendrá derecho al subsidio durante las situaciones de huelga o cierre patronal.

Tipos de bajas laborales

Hemos señalado que existen distintos tipos de bajas laborales. Estas se clasifican en función de los motivos que han generado esa baja:

Bajas laborales por contingencias profesionales

Son aquellas que se producen en el ámbito del trabajo. Estas son certificadas y tramitadas por la mutua contratada previamente por la empresa. Dentro de esta categoría, existen dos más:

o   Por accidente profesional, es decir, el empleado se lesiona en el transcurso de su jornada laboral a causa de su actividad o en el desplazamiento a su centro de trabajo.

o   Por enfermedad profesional, lo cual quiere decir que el empleado ha contraído esa enfermedad debido a su actividad dentro de la empresa.

Bajas laborales por contingencias comunes

Son aquellas que se producen fuera del ámbito profesional y que tienen que ver con enfermedades o accidentes acaecidos al margen de la actividad laboral. Han de ser certificadas por un médico, que además deberá prever el tiempo de recuperación.

En estas últimas, en las bajas por contingencias comunes, caben múltiples casuísticas, desde motivos derivados de la salud mental como el estrés, la ansiedad o la depresión, a accidentes domésticos que incapacitan al trabajador temporalmente, dolencias médicas o enfermedades graves.

En el caso de la covid-19, aunque se considera una baja por contingencias comunes, se paga como una por contingencias profesionales, a diferencia de, por ejemplo, la gripe.

Cómo pedir una baja laboral

La gestión de una baja laboral conlleva un trámite farragoso para los departamentos de Recursos Humanos, normalmente encargados de su tramitación. Por su parte, el trabajador tan solo tendrá que obtener el certificado médico oportuno. Este es necesario para iniciar el proceso y para  el derecho al subsidio por IT. Si la enfermedad se extiende, tendrá que presentar, además, los partes de confirmación pertinentes.

En este primer certificado médico debe constar el motivo de la baja laboral y la fecha de inicio. El médico que lo expida se lo entregará al trabajador, y será este el encargado de proporcionar una copia a la empresa. Para ello, contará con un plazo de tres días. El departamento de RRHH dispondrá de cinco para remitir el parte al INSS o la mutua.

De la misma forma, el empleado tendrá que solicitar un alta médica cuando sea oportuno e incorporarse a sus funciones en 24 horas.

Existe un requisito a la hora de pedir una baja laboral y el subsidio correspondiente. Este se aplica solo en caso de enfermedad común o accidente no laboral. El empleado debe estar afiliado a la Seguridad Social, en alta o en situación asimilada al alta y tener cubierto un período de cotización de 180 días durante los cinco años anteriores.

¿Por qué las bajas laborales son un lastre para empresas y trabajadores?

Las bajas laborales suponen, a menudo, un gran problema para empresas y empleados. 

En primer lugar, trastocan la organización en el seno empresarial y, por ello, la actividad diaria. En segundo lugar, contribuyen a un aumento del índice de rotación, Y en tercer lugar, son un indicador de la salud y el bienestar dentro de la empresa, a más bajas, más probabilidades de que algo esté fallando dentro de la corporación.

Así pues, no es de extrañar que cada vez más empresas en nuestro país habiliten medidas para contrarrestar las bajas laborales. Una de estas soluciones pasa por habilitar planes de retribución flexible y beneficios sociales cuyo objetivo sea mejorar el bienestar de los empleados. Nos referimos a iniciativas que incorporen desde un seguro de salud que preserve la salud de la plantilla a programas de wellness corporativo para mejorar el ambiente laboral.

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