Cómo hacer un buen plan de incentivos para tu empresa
Si quieres motivar a tu plantilla y no sabes por dónde empezar, hazlo a través de incentivos personalizados. Pero ¿cómo hacer un plan de incentivos a la carta? Una de las formas más sencillas es abordar el diseño e implantación de beneficios empresariales flexibles. Es decir, un programa que responda a las necesidades y expectativas de quienes forman parte de la plantilla empresarial. Y que ayude no solo a mejorar su motivación a través del bienestar, sino también su rendimiento.
¿Quieres saber cómo hacer un plan de incentivos para empleados realmente eficaz? Sigue leyendo.
Paso 1. Beneficios para empleados realmente efectivos
Existe un primer paso ineludible para hacer un buen plan de incentivos para tu empresa, y es realizar un diagnóstico de las necesidades del equipo de trabajo. Porque, evidentemente, estas no serán las mismas en una empresa tecnológica donde los perfiles junior cuenten con menos de 30 años, que en una de servicios bancarios dónde la media senior esté a punto de jubilarse.
Según el último informe de beneficios lanzado por Cobee a principios de año, existen grandes diferencias, por ejemplo, entre generaciones. Así, las y los profesionales adscritos a la generación Z (personas nacidas entre el 97 y el 2012) o la denominada millennial (entre el 81 y el 96) prefieren los beneficios vinculados al bienestar físico o mental. Sin embargo, los boomers (nacidos entre el 46 y el 64) se decantan por el bienestar financiero. Y esta es solo la punta de un gran iceberg de expectativas laborales muy diversas.
Herramientas como las encuestas de clima laboral, las evaluaciones de desempeño u otro tipo de cuestionarios suelen ofrecer importantes conclusiones sobre las mejoras y los incentivos que reclaman las plantillas.
Paso 2. Un plan para fortalecer a la empresa
Una vez aclaradas las principales reivindicaciones de los empleados y empleadas,. Lo normal es que respondiendo a las necesidades trasladadas por la plantilla, la empresa logre resolver muchas de sus debilidades: la falta de cooperación entre profesionales, casos de abuso de poder o desigualdad, etcétera.
Así pues, el departamento de RRHH, encargado de abordar cómo hacer un programa de incentivos laborales, deberá fijar unos objetivos en función de esas necesidades de mejora. Y a partir de ahí, redactar un plan concreto de medidas y beneficios empresariales para alcanzarlos.
Paso 3. Comunica tus nuevos incentivos
De nada servirá todo el trabajo llevado a cabo en los pasos anteriores si la empresa no comunica su intención de mejorar las condiciones laborales a través de un plan flexible y personalizado. Establecer canales concretos de comunicación con la plantilla resulta vital. De esta forma, una vez lanzado el plan de incentivos o compensación, los y las profesionales podrán adherirse al mismo.
Paso 4. Seguimiento, evaluación y mejora
Este paso es tan importante como los anteriores. Hemos de asegurarnos de que nuestro plan funciona, de que realmente responde a las demandas de nuestra plantilla, y que logra niveles de adhesión aceptables. de lo contrario, tendremos que modificarlo hasta dar con el plan de beneficios o complementos adecuado.
Ventajas de hacer un plan de incentivos
Los beneficios de hacer un plan de incentivos inciden de forma profunda en la motivación de los empleados y empleadas. Y lo hacen en muchos sentidos.
- Desde el punto de vista económico, pues redundan en un mayor poder adquisitivo de la plantilla.
- Desde el punto de vista del bienestar: pues mejoran las condiciones de trabajo de los equipos.
- A nivel laboral: porque mejoran el clima de trabajo, la organización del mismo y el reparto de tareas y responsabilidades.
- A nivel empresarial: porque aumenta la productividad y disminuye handicaps tan importantes como el nivel de rotación de personal, el ausentismo o la fuga de talentos.
Estas ventajas son posibles gracias a la consolidación de beneficios muy diversos: de apoyo a la conciliación, de flexibilidad laboral, de promoción, de oportunidades de mejora formativa, de transparencia salarial y justicia social, de incrementos del poder adquisitivo a través de descuentos para empleados o de la retribución flexible, etcétera.
Ahora que ya sabes cómo hacer un plan de beneficios para empleados, ¿a qué esperas para dar el paso?