Employee Engagement
El término Employee Engagement hace referencia al nivel de compromiso que alcanzan los empleados y empleadas de su empresa.
Dicho compromiso adquiere una fuerte dimensión emocional, pues conlleva la implicación psicológica y afectiva del trabajador o trabajadora respecto a la entidad que representa. Es decir, el vínculo establecido no solo tiene que ver con el desempeño de su actividad diaria, sino con una grado máximo de motivación y alineamiento con los valores de la empresa, capaz de elevar el rendimiento, la capacidad de innovación y la consecución de resultados más que satisfactorios.
Claves del Employee Engagement
El Employee Engagement está ligado al grado de felicidad y satisfacción de las y los profesionales en su centro o puesto de trabajo. Estos últimos contribuyen al desarrollo del Employee Engagement.
Sin embargo, dicho concepto va más allá, se refiere a una implicación máxima en la actividad empresarial que convierte los éxitos de la marca en propios. Quienes alcanzan niveles superiores de Employee Engagement se sienten plenamente comprometidos con la organización. Esto conlleva altas dosis de proactividad y entusiasmo en el entorno laboral. Se consideran parte del futuro de la empresa.
En este sentido, los valores empresariales y la cultura organizacional juega un papel fundamental. El Employee Engagement es mayor cuando los trabajadores y trabajadoras se sienten alineados con la ética y objetivos de la marca. Esto ocurre porque el compromiso en el trabajo emana de un sentimiento de apego, de lealtad de un individuo hacia su empresa, de ambición compartida.
El Employee Engagement posibilita:
El aumento de la productividad, motivada por una mayor innovación, capacidad creativa, altas dosis de liderazgo en todos los roles de la empresa y esfuerzos adicionales para cumplir con las responsabilidades.
Una mayor tasa de retención, derivada de una fuerte cultura de compromiso con el futuro de la actividad y de la empresa y niveles de felicidad y satisfacción más elevados entre empleados y empleadas.
Aumento de la rentabilidad, por una disminución del absentismo y un aumento de la eficiencia, la productividad y la calidad del servicio, que se traslada en una mejor experiencia también para la clientela.
Los equipos de Recursos Humanos son cada vez más conscientes del peso del Employee Engagement en el éxito de las organizaciones. Fenómenos como las renuncias masivas en entornos laborales en EEUU tras la pandemia sanitaria de 2020 pusieron de manifiesto que los jóvenes talentos buscan oportunidades profesionales motivantes, donde su compromiso contribuya al desarrollo de proyectos destinados a dejar una huella positiva en el entorno, más allá del afán de promoción o de alcanzar un salario mayor.
Así pues, aunque la teoría sobre la importancia del compromiso de los empleados y empleadas en la gestión empresarial surgiese a mediados de la década de los 90, no ha sido hasta la década vienen entrada la década de 2020 que los departamentos de RRHH y Comunicación interna han puesto el foco sobre dicha necesidad.