Autocuidado: prácticas para mantener la salud física y mental en el trabajo
El autocuidado se ha convertido en un pilar fundamental de las estrategias de salud y bienestar de las empresas. La necesidad de que las plantillas se muestran proactivas al respecto ha suscitado todo un abanico de acciones encaminadas a impulsar el autocuidado desde las organizaciones.
Tabla de contenidos
- Importancia del autocuidado
- Principios básicos de autocuidados personales
- Estrategias para el autocuidado emocional y mental
- Herramientas y recursos para el autocuidado
- Barreras comunes al autocuidado y cómo superarlas
Importancia del autocuidado
Implementar una cultura del autocuidado en el trabajo significa implicar a los y las profesionales en su camino hacia el bienestar y la salud. De hecho, el autocuidado ha ganado peso en las políticas de prevención de riesgos. Tanto es así que han tomado la misma relevancia que, por ejemplo, los planes de detección de enfermedades a través de revisiones médicas a cargo de la compañía.
El autocuidado se adopta, además, desde una perspectiva integral y transversal. Y sus resultados son, igualmente, sistémicos. De hecho, entre los beneficios de los autocuidados personales encontramos:
- Beneficios físicos y mentales: gracias al autocuidado físico y al autocuidado de la salud mental.
- Un fuerte impacto en la calidad de vida dentro y fuera de las organizaciones.
- Un paso más hacia la prevención de enfermedades y promoción de la salud.
Principios básicos de autocuidados personales
Los autocuidados personales pueden adoptar muchas formas, pues incide en diversas áreas de la salud. Suelen ser comunes:
- Alimentación saludable: los programas que capacitan a las plantillas para adoptar hábitos nutricionales saludables, ya sea a través de píldoras formativas online o de charlas a cargo de personas expertas.
- Ejercicio físico regular: planes de retribución flexible y compensación que incluyen el bono mensual de acceso a un centro deportivo, diseño de instalaciones propias para la práctica de actividad, aplicaciones gratuitas de fitness, etc.
- Higiene personal: tanto en el puesto de trabajo como fuera de él, gracias a la adquisición de rutinas que tienen que ver con el lavado de manos, la higienización de uniformes de trabajo, etc.
Estrategias para el autocuidado emocional y mental
La necesidad de impulsar el autocuidado emocional y mental ha crecido en los últimos años. Para implementarlo, desarrollarlo e incrementarlo, las empresas han adoptado una serie de medidas. Algunas de ellas consisten en:
- Técnicas de relajación y manejo del estrés: Bien a través de clases colectivas impartidas en el propio centro de trabajo, bien facilitando el acceso a estos servicios de manera externa o mediante aplicaciones móviles para su consulta online. La Meditación y mindfulness o los Ejercicios de respiración entrarían dentro de estas técnicas.
- Establecimiento de límites personales y profesionales: Las medidas para la conciliación de la vida familiar, personal y laboral son el gran reclamo de nuestra época. La importancia del equilibrio entre trabajo y vida personal es tal que se ha convertido en un factor fundamental a la hora de decantarse por una oferta de trabajo, incluso por encima del sueldo.
- También son cada vez más necesarios los talleres, sesiones dinámicas grupales sobre cómo decir «no» sin sentirse culpable. Estos últimos permiten a los profesionales situarse en una posición de fuerza frente a ciertos abusos laborales.
Herramientas y recursos para el autocuidado
Como hemos señalado, las herramientas y recursos para impulsar el autocuidado desde la empresa son múltiples. Gracias a ellos, esta puede llegar a un espectro más amplio de su plantilla, acomodándose a sus necesidades y posibilidades de acceso:
Aplicaciones móviles y tecnología para el autocuidado:
Apps de seguimiento de hábitos saludables.
Plataformas online para ejercicios guiados y meditación.
Libros y guías sobre autocuidado:
Recomendaciones literarias para profundizar en el tema.
Formación y sensibilización en vivo:
Conferencias, talleres, cursos grupales.
Sesiones individuales y personalizadas.
Barreras comunes al autocuidado y cómo superarlas
El autocuidado cuenta con un gran enemigo: la falta de tiempo y el cansancio crónico al que se ven abocados muchos y muchas profesionales. De hecho, suelen ser desafíos del autocuidado la falta de tiempo y organización personal. También la desmotivación o falta de conocimiento.
Contra estos hándicaps, existen soluciones que pueden ponerse en práctica:
- La interiorización de técnicas para gestionar mejor el tiempo dedicado al autocuidado.
- Una optimización y mejora en la gestión y asignación de las cargas de trabajo y familiares para evitar la sobresaturación de responsabilidades.
- Formación continua sobre cómo fomentar el autocuidado de manera efectiva en todas las áreas posibles.
- Encontrar en la mejora de la salud y el bienestar la motivación necesaria para impulsar el autocuidado diario.
Hoy en día, fomentar el autocuidado en una organización es apostar por el futuro de una plantilla sana y preparada, física y mentalmente, para afrontar los desafíos del futuro.