Cómo evitar el sedentarismo en el trabajo

Evitar el sedentarismo en el trabajo no es difícil. Incluso cuando pasamos ocho horas diarias en una oficina, delante del ordenador, se puede combatir el sedentarismo. La importancia de hacerlo es cada vez mayor. De ello depende nuestra salud física y mental.

Tabla de contenidos

• Los peligros del sedentarismo en el trabajo
• Soluciones empresariales para prevenir el sedentarismo 
• Motivar a tus compañeros de trabajo

Los peligros del sedentarismo en el trabajo

Las bajas por incapacidad temporal aumentaron un 35 % el pasado año en nuestro país. Y las debidas a trastornos mentales ganan terreno, especialmente entre las personas jóvenes. No todas se deben a la falta de actividad, claro está, pero sin duda, las acciones para combatir el sedentarismo contribuyen a minimizar los riesgos. Los peligros del sedentarismo son muchos.

• Obesidad.
• Aparición de enfermedades cardíacas.

• Diabetes.
• Hipertensión.
• Problemas de espalda y otros de carácter musculoesquelético.
• Estrés.
• Episodios de ansiedad.
• Vértigos.

La lista es larga, y la mayoría de quienes trabajan de forma sedentaria sufren alguna de estas consecuencias, en menor o mayor medida. Quizás especialmente los perfiles más jóvenes. Al fin y al cabo, son ellos quienes se dedican en mayor medida a tareas digitales.

No en vano, según el último informe sobre tendencias en beneficios elaborado por Cobee, mientras la generación boomer prefiere los beneficios vinculados al bienestar financiero, la generación Z y los millennials prefieren los que redundan en el bienestar físico o mental. 

Soluciones empresariales para prevenir el sedentarismo

El sedentarismo en el trabajo contribuye a todos esos fenómenos descritos anteriormente. Las empresas lo saben, de ahí que muchas de ellas abracen soluciones en favor de la salud de sus plantillas. 

Lo hacen a través de planes de bienestar físico para prevenir el sedentarismo en los equipos de trabajo. También, mediante seguros de salud colectivos. En realidad, existe un largo etcétera. Son muchas las formas de combatir el sedentarismo desde una organización, así como recomendaciones para evitar el sedentarismo. 

• Hacer pausas activas durante el día: lo recomendable es levantarse de la silla cada dos horas. Podemos aprovechar el momento para ir al baño o beber agua. Lo importante es estirar las extremidades y la espalda.

• Elevar el escritorio o el ordenador: se trata de una de las medidas ergonómicas más efectivas para combatir los dolores cervicales, de espalda y la aparición de vértigos. También lo son utilizar una silla ergonómica, un reposa pies y teclado y ratón adaptados.

• Caminar o andar en bicicleta al trabajo: sumar a tu rutina diaria esta práctica puede cambiarte la vida. Aprovechar los desplazamientos cotidianos para hacer ejercicio es un talismán contra los estragos del sedentarismo. También lo es tomar las escaleras en lugar del ascensor.

• Hacer ejercicio durante el almuerzo: hay quien incluso aprovecha el lapso de la comida para ir al gimnasio. Una opción más que asequible cuando el plan de beneficios de nuestra empresa ofrece ventajas en la contratación de este servicio. 
• Incorporar el movimiento a tu trabajo: ¿Cómo? Os estaréis preguntando. Existen varias formas de conseguirlo, por ejemplo, utilizando una pelota de pilates como silla de trabajo. Esta tendencia se ha extendido como la pólvora por sus ventajas a la hora de corregir la postura y permanecer en movimiento.

Podríamos enumerar muchos más consejos para combatir el sedentarismo. Pero tan solo con poner al menos dos de estos en práctica, estarías contribuyendo de forma decisiva a tu bienestar. 

Motivar a tus compañeros de trabajo

Las acciones para combatir el sedentarismo siempre son más efectivas cuando contamos con el apoyo de los demás. 

De hecho, existen multitud de empresas en nuestro país con planes deportivos para su plantilla. Estos suelen materializarse en la organización de torneos de fútbol, competiciones de pádel, etc. Una fórmula idónea. Y no solo en favor de los ejercicios para evitar el sedentarismo en el entorno laboral, sino para fomentar el compañerismo, la cultura de empresa basada en el bienestar y el sentimiento de pertenencia a la organización.

Como hemos señalado, los actuales planes de beneficios empresariales adoptan estrategias para evitar el sedentarismo. Estas son especialmente atractivas para los y las profesionales de menor edad. De hecho, mientras el gimnasio virtual como beneficio de empresa resulta interesante solo al 2,5 % de las personas entre 45 y 55 años, lo es para el 10 % de entre quienes tienen menos de 24.

Si tu empresa aún no se ha subido al carro del bienestar, propónselo. Y mientras tanto, adopta algunos de los anteriores tips para combatir el sedentarismo.