La epidemia del ghosting laboral: ¿qué está pasando?
El término Ghosting es un habitual, desafortunadamente, de las relaciones amorosas. Lo empleamos desde hace ya varios años para hablar de quienes desaparecen de la noche a la mañana sin dar explicaciones. Pero ¿quién iba a pensar que se extendería también al mundo del trabajo? Exacto, el Ghosting Laboral es cada vez más habitual. Os damos algunas claves sobre por qué ocurre este fenómeno y cómo prevenirlo.
¿Por qué ocurre el Ghosting en el trabajo?
El Ghosting en el trabajo es más habitual de lo que pensamos. Que se lo digan, sino, a los departamentos de RRHH, hartos de lidiar con este fenómeno que acarrea numerosos problemas.
Pero, ¿qué empuja a ciertas personas a desaparecer sin más?, ¿a abandonar su puesto de trabajo sin previo aviso?, ¿a no presentarse a una entrevista ya concertada?, ¿a no acudir al primer día en una nueva empresa? Existen muchas razones detrás de un Ghosting en el trabajo. Estas son las más habituales, según grupos expertos:
- De la baja autoestima al Ghosting laboral: nos encontramos ante una fuerza de trabajo que, en ocasiones, arrastra problemas emocionales y muchas inseguridades, quizás fruto de malas experiencias en el entorno laboral. Así que, ciertos trabajadores o trabajadoras se ven incapaces de enfrentarse a un mando superior para dar explicaciones o hablar cara a cara sobre la necesidad de dejar el puesto de trabajo, porque no es lo que esperaba o porque ha encontrado otra oferta más conveniente. Así que, simplemente lo dejan sin rendir cuentas.
- El problema de la transparencia empresarial: otra buena causa es la incapacidad de la empresa para trasladar al futuro empleado o empleada sus funciones, objetivos o la visión y valores de la empresa durante el proceso de selección. A veces, sucede que la persona contratada se encuentra con un escenario totalmente diferente al que le habían presentado como propuesta de valor. Ni el ambiente es como pensaba ni los propósitos de la compañía, sus responsabilidades o condiciones de trabajo. En otras palabras, acude un día, una semana…, y después simplemente deja de ir, protagoniza un Ghosting laboral.
Si a esto sumamos las características de ciertos sectores económicos, donde las ofertas de trabajo son abundantes o donde la mano de obra está precarizada, nos encontramos con el caldo de cultivo perfecto para el Ghosting en el trabajo.
Las consecuencias del Ghosting Laboral para la empresa y el trabajador
El Ghosting Laboral no solo trae de cabeza a los responsables de personal de las empresas, también a los de grupos de trabajo o departamentos concretos.
Los primeros, porque a causa del Ghosting Laboral han de reanudar un proceso de selección que habían dado por zanjado, y los segundos, porque deben cubrir la ausencia de una persona ya incorporada o que debía hacerlo de inmediato.
Los problemas organizativos son enormes, así como el sobrecoste de recursos y tiempo al que deben hacer frente las empresas para dar de baja ese perfil, reanudar la búsqueda del candidato o candidata ideal, acogerlo y formarlo adecuadamente.
Para esa persona que se va sin más también existen contraindicaciones por cuenta del Ghosting en el trabajo. Por un lado, su reputación queda dañada; por otro, perpetúa la incapacidad para enfrentarse a situaciones indeseadas.
¿Cómo prevenir el Ghosting en el trabajo?
El Ghosting en el trabajo puede prevenirse. Y está en manos del departamento de RRHH poner remedio a tal molesto inconveniente y evitar ser víctima del Ghosting Laboral.
Estas son algunas de las medidas contra el Ghosting en el trabajo:
- Absoluta transparencia en la fase de reclutamiento y contratación. Mientras más y mejor definidas estén las tareas del nuevo perfil a través de un profesiograma, mejor; sus obligaciones, condiciones de trabajo y salariales, etcétera, menos probabilidades existirán de que protagonice un Ghosting en el trabajo. Incluso podemos mostrarle las instalaciones y presentarle a quienes serían sus compañeros de trabajo para que capte el ambiente corporativo, si es que la empresa está especialmente interesada en ese talento concreto.
- Confianza desde el primer minuto. Hablar con cercanía y honestidad a la persona candidata puede hacer ganar mucho tiempo. Trasladar la necesidad de que sea sincera si algo no le encaja el primer día de trabajo o que contacte cuanto antes si decide no acudir, con total normalidad. El Ghosting Laboral se disipa cuando fomentamos la confianza mutua, la comunicación y la asertividad.
Cómo manejar el Ghosting Laboral si ya ha sucedido
La clave para no sucumbir ante un caso de Ghosting Laboral reside en la previsión y la capacidad de reacción. Es decir, sería conveniente que el departamento de personal tuviera definido un protocolo de actuación ante casos como este, para ganar así tiempo y evitar costes sobrevenidos.
Contar con una lista de posibles candidaturas dispuestas a incorporarse con celeridad debería formar parte de ese plan de crisis para evitar que un caso de Ghosting en el trabajo se convierta en una auténtica pesadilla para el departamento de RRHH.
Ejemplos de Ghosting Laboral en la actualidad
Un ejemplo común de Ghosting Laboral es aquel en el que una persona candidata acude al primer día de trabajo y no vuelve más.
Su mando superior intenta contactar con ella durante la jornada, para saber los motivos del retraso, y encuentra el móvil apagado. El equipo de RRHH intenta también contactar por otras vías, email, WhatsApp, pero el resultado es el mismo.
En definitiva, la persona no contesta y, mientras tanto, la empresa no sabe si llamar a la siguiente candidatura o esperar por si hubiese pasado algo, un accidente in itinere, etc. Se trata de una situación realmente desagradable que mantiene en jaque al equipo corporativo.
Conclusiones y reflexiones sobre el Ghosting en el mundo laboral
Como hemos señalado, el actual mercado laboral ofrece los ingredientes necesarios para que ciertos sectores sean presa del Ghosting en el trabajo, a pesar de que la empresa haga esfuerzos por evitarlo. Bien por falta de mano de obra en puestos que requieren perfiles muy específicos y cualificados; bien por su precarización y alta demanda.
De hecho, muchas veces, la causa del Ghosting laboral estriba en la superposición de ofertas. Es decir, la persona candidata acepta un puesto de trabajo y, al cabo de unas horas, otra empresa se pone en contacto para informarle de que quieren contar con su perfil. Si esta última le resulta más atractiva, no acudirá al nuevo trabajo.
Incluso a veces ocurre que es la empresa actual de esa persona la que lanza una contraoferta para evitar que se vaya. Esta puede consistir en una mejora salarial o en la propuesta de un plan de compensación total. Si acepta, ya no acudirá al nuevo puesto de trabajo y, si apuesta por un Ghosting Laboral, tampoco llamará para comunicar su decisión.
Sea como sea, si desde RRHH ponen remedios al problema, lograrán reducir significativamente los casos de espantada o Ghosting en el trabajo.