Nómada digital: guía completa para convertirte en uno

Cobee Team · 

nómada digital

Ser nómada digital ya no es una rareza. Pertenecer a esta tribu de empleados y empleadas es factible en según qué sectores. Y, además, conlleva cada vez más ventajas. Las organizaciones lo ponen hoy más fácil que nunca. Las Administraciones públicas, también.

¿Qué es un nómada digital?

Nómada digital, ¿qué es? Para responder a esta pregunta debemos echar la mirada hacia atrás en el tiempo y comprender el contexto del que partimos.

Smart Working, freelance, trabajo móvil, trabajo en remoto, teletrabajo, trabajo híbridoLa pandemia revolucionó las formas de trabajar. De hecho, la situación excepcional que acarreó la crisis sanitaria supuso la generalización de modalidades que hasta la fecha eran muy excepcionales. También la de nuevas propuestas. Alternativas que, por otra parte, no hubieran sido posibles si no nos encontrásemos, entonces, al inicio del camino de la completa digitalización de las empresas.

Pero ¿qué lugar ocupa el término nómada digital entre todos los anteriores? ¿Qué significa? ¿Existía ya antes? Vamos a dar respuesta a varias de las preguntas en torno al nómada digital.

Definición y características principales

Ser nómada digital significa ser un teletrabajador de carácter internacional. Al menos, así lo indica el propio Ministerio de Economía, Comercio y Empresa de España.

Según la Administración, y a efectos oficiales, un nómada digital en España, por ejemplo, es aquella persona extranjera, no procedente de la UE, que solicita “una residencia por teletrabajo de carácter internacional”. ¿Con qué fin? El de “ejercer una actividad laboral o profesional a distancia para empresas radicadas fuera del territorio nacional, mediante el uso exclusivo de medios y sistemas informáticos, telemáticos y de telecomunicación”.

Y aclara que en el caso de tratarse de una actividad profesional y no laboral, dicha persona podrá trabajar para una empresa ubicada en España, siempre y cuando no le dedique más del 20 % del total de su actividad.

Diferencias con el teletrabajo tradicional

Dicho lo anterior, la principal diferencia del nómada digital con el teletrabajador tradicional queda clara: esta estriba en el país de origen de dicho profesional y de la organización para la cual trabaja.

Historia y evolución del concepto de nómada digital

Aunque el término viene de lejos, es durante los últimos cinco años cuando se ha popularizado. De hecho, hoy en día son muchos los territorios que pugnan por convertirse en el destino ideal para el nómada digital. Y habilitan para ello fórmulas ventajosas a todos los niveles: habitacional, tributaria, etc.

Orígenes del término

El término nómada digital apareció por primera vez en la portada de un libro: Digital Nomad (1997), donde los autores Tsugio Makimoto y David Manners desgranaban un nuevo modo de trabajar y de vivir en movimiento. Una forma de trabajar que, años más tarde, está calando en el mercado laboral.

Evolución a lo largo de los años

Aunque hasta hace bien poco la mayoría de los y las profesionales que se calificaban como nómadas digitales eran personas autónomas o freelance, hoy en día el perfil está cambiando. 

Gracias a la proliferación de multinacionales ligadas a servicios tecnológicos y de las TIC, aumentan los nómadas digitales empleados por cuenta ajena. De hecho, muchos de ellos eligen España como destino predilecto. Y dentro de esta, sus islas y ciudades costeras. No en vano, España se sitúa a la cabeza del Digital Nomad Index.

Ventajas de ser un nómada digital

Las ventajas de ser un nómada digital hoy en día son muchas. De hecho, para algunos y algunas profesionales, supone cumplir un sueño ligado a un estilo de vida concreto:

  • Flexibilidad geográfica y horaria: poder trabajar desde donde se quiere, por ejemplo, desde una isla paradisiaca en otro continente, y por objetivos, es decir, con total libertad horaria. 
  • Oportunidades de crecimiento personal y profesional: hace viable la posibilidad de trabajar para grandes multinacionales extranjeras y avanzar en la carrera profesional sin necesidad de desplazarse a otro país. Este punto es especialmente importante cuando se desea conciliar vida profesional, personal y familiar.
  • Reducción de costos y mejora en la calidad de vida: esta modalidad permite un gran ahorro económico respecto a costes de desplazamiento, de vivienda, etc. Pues permite trabajar desde casa para oficinas ubicadas en la otra punta del mundo.

Desafíos y desventajas del estilo de vida nómada digital

Pero no todos son ventajas, también existen inconvenientes o desafíos que los y las nómadas digitales deben saber afrontar:

  • Inestabilidad laboral y financiera: especialmente cuando hablamos de personas que trabajan como autónomas y/o para varios clientes.
  • Dificultades para mantener una rutina estable: este es uno de los grandes hándicaps de todo teletrabajo en general. Por fortuna, existen consejos que podemos incorporar para superar dicha dificultad. 
  • Problemas relacionados con la conectividad y tecnología: de ahí la importancia de contar con los medios técnicos necesarios y trabajar desde un destino que garantice la cobertura digital necesaria.

Cómo convertirse en un nómada digital

Convertirse en nómada digital no es solo una cuestión de querer, es de poder. Porque existen requisitos legales a tener en cuenta.

Habilidades y profesiones más demandadas

La normativa española exige a los nómadas digitales la acreditación de estar en posesión del grado o postgrado de universidades de reconocido prestigio. También contempla la posibilidad de formación profesional y formación en escuelas de negocios de reconocido prestigio. O bien, contar con una experiencia profesional mínima de tres años.

A estas hay que sumar los requisitos que suelen pedir a las personas nómadas digitales las empresas, normalmente multinacionales ligadas al sector tecnológico o de la investigación e innovación.

Estos suelen incidir en altas habilidades y competencias en entornos digitales colaborativos. Y, por supuesto, en el manejo de tecnologías disruptivas de la comunicación e información. También un elevado nivel de proactividad, responsabilidad (pues la mayoría trabajan por objetivos) y capacidad de engagement respecto a la organización.

Herramientas tecnológicas esenciales

Otros de los requisitos que exige la Administración en España es aquella documentación acreditativa de que la relación laboral o profesional se puede realizar en remoto. Es decir, que la actividad se puede desempeñar a distancia gracias a internet. Y que dicha persona, para el desempeño de su labor como nómada digital, cuenta con las herramientas tecnológicas necesarias. Nos referimos a un portátil u ordenador de mesa, a conexión a internet, a las aplicaciones o software necesarios…, etc.

Aspectos legales y fiscales para nómadas digitales

Además de todo lo citado anteriormente, los nómadas digitales en España deben cumplir otras obligaciones para poder serlo.

Visas y permisos de trabajo internacionales

Por un lado, que la actividad sea real y continuada entre empresa y profesional, y que dicha relación exista desde hace al menos tres meses. Por otro, aportar los documentos que acrediten tanto los términos como las condiciones de la actividad a distancia. Y por último, un visado específico (en vigor desde 2022), el denominado visado de residencia para teletrabajo (nómada digital).En virtud del mismo, si la persona solicitante de la condición de nómada digital en España se encuentra fuera del país, podrá “obtener un permiso para, si lo desea, residir y trabajar en todo el territorio nacional”. Este será de un año, a no ser que el periodo de trabajo sea inferior. Después, el o la profesional tendrá que solicitar una autorización de residencia de tres años para residir y trabajar en todo el territorio nacional. Eso sí, siempre en cumplimiento de los requisitos para dicho visado.

Implicaciones fiscales al trabajar desde el extranjero

La visa de nómada digital de España, mencionada anteriormente, introduce ciertos beneficios fiscales. Estos pretenden apuntalar el destino España como un lugar atractivo para los y las profesionales de todas partes del mundo que pueden trabajar a distancia desde cualquier país.

Dichas ventajas suponen:

  • Régimen Beckham: Si se consideran no residentes a efectos fiscales (y se cumplen los requisitos asociados), estar sujetos a una tasa impositiva fija del 24 % sobre los ingresos obtenidos en España (hasta 600.000 euros, después, la tasa será del 47 %). Este régimen permite al nómada digital evitar el tipo progresivo habitual, que puede alcanzar una tasa de hasta el 50 %.

Además, el nómada digital sujeto a este supuesto no debe afrontar el pago del impuesto sobre el patrimonio y verá reducidos otros tipos impositivos. Si además procede de un país que mantiene un convenio de doble imposición con España, seguramente no tendrá que asumir una doble imposición. 

  • Siendo residente fiscal en España como nómada digital, el o la profesional debería asumir el pago del IRPF anual, que puede alcanzar hasta el 47 %.

Otro caso es el de españoles y españolas en terceros países. Desde julio de 2023, los y las profesionales desplazados al extranjero que desempeñan su labor para empresas del territorio español, exista o no un convenio de vinculación con la Seguridad Social entre ambos países, podrán cotizar en España.

Esta medida se articuló para ofrecer mayor flexibilidad y seguridad a quienes trabajan de manera itinerante o indeterminada en otros países. También para facilitar las cosas a las empresas respecto a sus obligaciones para con la Seguridad Social.

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