Qué es el ausentismo laboral y cómo reducirlo en tu empresa
El ausentismo laboral o absentismo laboral se refiere a la ausencia al puesto de trabajo por parte de un empleado o empleada. Y aunque las causas pueden estar justificadas o no, el concepto de ausentismo laboral está ligado a connotaciones negativas, es decir, a un tipo de ausencia recurrente y no justificada o moralmente reprochable.
El ausentismo laboral en España se colocó en el 6,5% durante el segundo trimestre de 2022, según el último estudio publicado por The Adecco Group Institute.
Este dato sigue siendo alto, a pesar de marcar cierta diferencia respecto al máximo histórico: el de 7,1 % en 2020 con motivo de la pandemia. Y es que, hasta el año 2017, dicha tasa, la de ausentismo laboral, nunca había superado el 5%.
Tabla de contenidos
Cómo se produce el ausentismo laboral y qué tipos hay
Existen varios tipos de ausentismo laboral. Si atendemos a la justificación y al lugar en el que se determina, existen cuatro categorías distintas:
Ausentismo justificado.
Puede justificarse ante la empresa y suelen estar contemplados por esta en los convenios colectivos o contratos. Nos referimos a una cita médica, una ausencia por enfermedad, baja de paternidad, fallecimiento de un familiar, etcétera.
Ausentismo injustificado.
La ausencia no puede justificarse. Entran en esta categoría las faltas sin aclarar, los retrasos… Suelen producirse de forma súbita, sin previo aviso, y ocasionan graves trastornos de organización empresarial.
Ausentismo presencial.
Tiene lugar en el propio lugar de trabajo. Nos explicamos mejor. El empleado se dedica a otros menesteres (que nada tienen que ver con sus responsabilidades en dicha empresa) en horas de trabajo. Puede tratarse de cosas personales o de actividades profesionales paralelas.
Ausentismo emocional.
Se denomina así a la desconexión emocional en el trabajo. A menudo puede estar suscitada con problemas de estrés, ansiedad, de presión u otro tipo de trastornos mentales. También puede ocurrir cuando un trabajador atraviesa una complicada situación familiar o profesional.
Si relacionamos el ausentismo laboral con sus causas, encontramos los siguientes tipos:
- Incapacidad temporal.
- Siniestralidad laboral (también in itinere)
- Enfermedad profesional.
- Enfermedad o accidente no laboral.
- Licencias y permisos contemplados por la legislación vigente (excedencias, embarazo de riesgo, cuidado de personas dependientes, etc.).
- Ausencias por huelgas u otros conflictos laborales.
- Ausencias no autorizadas.
En estas últimas entrarían las ausencias injustificadas, que son las que verdaderamente suponen un problema para la organización diaria de la empresa.
Consejos para reducir el ausentismo laboral
Estrés, ansiedad, mobbing empresarial, síndrome del trabajador quemado, falta de retribución… Existen muchas causas que provocan altas tasas de ausentismo y de las que son responsables las empresas.
Por esa razón, las respuestas para dar la vuelta a dicha situación deben partir de la propia organización. Ya se sabe, si se es parte del problema, se tiene que ser parte de la solución.
Veamos algunas de las iniciativas más eficaces a la hora de reducir el ausentismo laboral:
- Los planes de beneficios sociales y retribución flexible.
Está demostrado que este tipo de acciones reducen notablemente el absentismo laboral, especialmente cuando este está íntimamente ligado a causas motivacionales.
Y lo hacen porque, entre otras cosas, logran aumentar la capacidad adquisitiva de los trabajadores. Son una potente herramienta contributiva. Pero no exclusivamente.
Los planes de compensación mejoran el clima en la empresa por diferentes razones: resultan motivacionales, ofertan servicios que mejoran la calidad de vida de los empleados, favorecen el bienestar de la plantilla en el centro de trabajo, etcétera. Y reducen el índice de rotación de personal, pues son una valiosa herramienta para retener el talento.
- Los seguros médicos corporativos.
Los seguros médicos, disponibles a través de los planes anteriormente mencionados, son otra herramienta a tener en cuenta.
Las coberturas médicas personalizadas están relacionadas con índices de absentismo laboral muy bajos. El trabajador dispone de acceso a servicios sanitarios inmediatos y flexibles, y esto redunda en un estado de salud y bienestar óptimo. En definitiva, a una menor tasa de absentismo por problemas médicos, ya sean estos físicos o mentales.
- Las técnicas de motivación empresarial.
Existe todo un catálogo de estrategias diseñadas para aumentar la motivación y bienestar de los empleados. Entre ellas destacan los planes de flexibilidad laboral y teletrabajo para facilitar la conciliación. Pero también las iniciativas para fomentar el compañerismo y el sentimiento de pertenencia (teambuilding), los planes de formación y promoción empresarial o las políticas de transparencia. En definitiva, toda una suerte de acciones que ponen al trabajador en el centro de la estrategia empresarial.
El ausentismo laboral es una traba importante para el buen funcionamiento de la empresa, para su organización, además de suponer un elevado coste. Ponerle freno fue uno de los grandes retos de los departamentos de RRHH el pasado año y, sin duda, seguirá siéndolo en 2023.